Desde hace varios años que el género del reality ostenta el título de "sinónimo de audiencia" en los más diversos rincones del planeta. Un fenómeno mediático y global que en nuestro país ataca fuerte a través de la TV local -léase Pelotón Vip o 1910- y por las diferentes señales del cable -MTV, VH1, People+Arts-, y al que no podían dejar de sumarse canales infantiles, o mejor dicho para público adolescente, como Boomerang.
El pasado agosto, este canal para el segmento juvenil estrenó ¿Quién quiere irse?, espacio ideado por Les Stroud -el canadiense que se hizo famoso gracias a Survivorman y que prefiere definir a su última creación como "serie documental" más que como reality- donde, después de un supuesto accidente de un bus escolar, un grupo de adolescentes queda a merced de sus instintos en medio de un bosque. Esto los deja además a punto de confrontar sus propios miedos y singulares personalidades.
Pero este no es el único show de Boomerang que enfrenta a los jóvenes a pruebas extremas y a una forzada convivencia. Proyecto adrenalina es el nombre de otro de sus programa que tiene a cinco aventureros chicos como sus protagonistas, compitiendo en desafíos físicos, pero a la vez muy intensos mentalmente. Sin embargo, el desafío va más allá, ya que estos cinco muchachos también deberán compartir con sus compañeros sus temores y frustraciones.
Dos ejemplos de la telerealidad y de cómo sus desafíos son atractivos para los más diversos públicos. Los mismos que debido a su buena recepción por parte de los púberes telespectadores de Boomerang volverán este mes con nuevos capítulos. El próximo lunes 7 será el turno de Proyecto adrenalina, desde las 21 horas, y el siguiente jueves, a la misma hora, será el turno de ¿Quién quiere irse?. Una oportunidad de reencuentro con sus seguidores y para que los adultos puedan saber un poco de cómo podrían comportarse sus hijos adolescentes ante desafíos extremos.