En la antesala de la marcha convocada por la CUT para este jueves, en plena Alameda, la que tiene como fin presionar al gobierno para agilizar el despacho de la agenda de reformas laborales comprometida por la Presidenta Michelle Bachelet, desde el Ejecutivo se confirmó ayer que la iniciativa se enviará al Congreso en el último trimestre del presente año.
La preocupación de la CUT es compartida por los partidos de la Nueva Mayoría. Esto, dado que el actual escenario de desaceleración económica que enfrenta el país ha llevado a varios expertos a señalar que este no sería el mejor momento para impulsar este tipo de proyectos.
Ayer, el tema fue abordado por los presidentes de las colectividades de la Nueva Mayoría, durante el tradicional comité político en Palacio, donde solicitaron una señal clara por parte del gobierno.
Así, durante la reunión, fue el propio ministro de Hacienda, Alberto Arenas, quien confirmó que el Ejecutivo cumplirá su palabra. Una idea que refrendaría el ministro vocero de Gobierno al término de la reunión, asegurando que la reforma "sin duda se va a anunciar (en la fecha prevista)".
Al ser consultada respecto de este tema, la titular del Trabajo, Javiera Blanco, aseguró a La Tercera que el cronograma sigue en la fecha prevista: "Esta reforma está pensada para el último cuatrimestre". Desde su ministerio precisaron, además, que lo más posible es que la presentación se materialice en octubre.
Junto a esto, la ministra recalcó que esta es una agenda que se está construyendo con todos los actores. "Queremos escucharlos a todos, hacer una construcción lo más integral posible y en eso estamos", aseguró la titular del Trabajo.
En esta línea, desde el ministerio confirmaron que a los encuentros que Blanco ha sostenido con la CUT y la multigremial CPC, las próximas semanas se sumarán encuentros con la Central Autónoma de Trabajadores (CAT), con la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), además de la Conapyme y la Unapyme, en una clara señal de continuidad normal del trabajo ya realizado desde el ministerio.
"(Esta agenda) lo que busca es aumentar los temas de paz social y eso es bueno, porque en el fondo cualquier inversión en materia de paz social es una inversión también en productividad", agregó la ministra, descartando así las especulaciones de expertos que han planteado que una agenda de reformas laborales podría traducirse en un impacto negativo en el crecimiento.
Junto a esto, desde el gobierno afirmaron que los contenidos de la reforma laboral se mantiene fiel a lo planteado en el programa de gobierno: fortalecimiento de la negociación colectiva y fin al reemplazo en caso de huelga, entre otros puntos. Esto, ya que, pese a que se confirmó que el paquete de reformas ingresará en octubre, había dudas en el oficialismo respecto del contenido de estas medidas.