La ministra de Educación, Mónica Jiménez, dijo hoy que la Ley General de Educación (LGE) ofrece grandes avances en todos los ámbitos educativos, en comparación con la actual Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza (LOCE).

En este sentido, destacó las creaciones de la Superintendencia y la Agencia de Calidad destinadas a salvaguardar el buen manejo de los dineros y garantizar el cumplimiento de los estándares establecidos para la calidad en la educación de los alumnos.

Señaló que la Superintendencia es la institución encargada de cuidar los recursos de todos los chilenos, lo que es un imperativo ético y de transparencia y obliga la probidad en la utilización de los recursos.

"Ahora el sostenedor, público o privado, tienen que tener giro único, no puede mezclar los recursos con otras áreas, es más, esta ley obliga que por todos los recursos haya rendición de cuentas, incluso la plata que aportan los apoderados en el financiamiento compartido", precisó.

Apuntó también, que con la LGE se propicia calidad y equidad educativa y la inclusión y el principio de integración de todos los alumnos a un sistema donde todos tienen derecho a una educación de calidad.

"Eso lo consagra esta ley y por lo tanto, todos los que participamos en educación tenemos que procurar activamente que esto ocurra", dijo Jiménez.

La ministra explicó que la LGE considera el concepto de comunidad escolar a los profesores, alumnos, directores, sostenedores, padres y apoderados, para fortalecer la buena convivencia entre todos ellos y así un mayor aprendizaje de los niños, niñas y jóvenes.