La inédita reacción del ministro argentino de Economía, Hernán Lorenzino, quien interrumpió una entrevista con la televisión griega al ser consultado sobre la inflación local, desató ayer una reacción crítica de los políticos de oposición, así como de destacados economistas. El papelón del funcionario, quien con la frase "me quiero ir" cortó el diálogo con la periodista Eleni Varvitsiotis, se convirtió, además, en el tema del momento en las redes sociales, generando incluso productos de merchandising, como poleras, una página web y hasta una cumbia sobre el incidente.
"Es la anécdota del día, pero el tema de fondo es que vamos por el séptimo año de manipulación del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) y la inflación ya no es la única estadística falsa: hoy son falsas las estadísticas de pobreza, de empleo, de salud", cuestionó el ex ministro de Economía Roberto Lavagna. El también ex titular de la cartera Ricardo López Murphy planteó que "son tan, pero tan truchas las estadísticas en Argentina, que hasta el mismo Lorenzino tiene que escaparse de una entrevista porque no puede ni defenderlas ni justificarlas".
Por su parte, el diputado de la Unión Cívica Radical Ricardo Alfonsín fustigó, a través de la red social de Twitter, la respuesta de Lorenzino: "Le preguntan por inflación y dice 'me quiero ir'; qué dirá para explicar por qué con 10 años de crecimiento récord seguimos con atraso y pobreza". El gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, también se hizo eco, en "cordobés básico", del traspié del ministro de Economía. "Si querei ite, ite iendo nomá, pero antes pagá lo que CFK (Presidenta Cristina Fernández) debe a los cordobeses", escribió De la Sota en su cuenta de Twitter.
Incluso, desde el oficialismo se deslizaron críticas hacia Lorenzino. Según el diario Clarín, los máximos dirigentes del grupo La Cámpora le reprochan al ministro de Economía su impericia para enfrentar dificultades como la deuda externa.
El diario porteño La Nación precisó que Varvitsiotis esperó cinco horas en el quinto piso del Palacio de Hacienda para entrevistar a Lorenzino, a mediados de diciembre. En el despacho del ministro mantuvo un diálogo de unos 40 minutos. La periodista griega había viajado a Argentina por un informe sobre cómo golpea la crisis económica mundial y las estrategias que adoptaron algunos países para salir adelante. "Me sorprendió su reacción. Yo le pregunté porque todas las personas con las que hablaba me decían que el problema número uno de la economía argentina era la inflación. Yo me imaginaba que él esperaba una pregunta sobre el tema, no me parecía una pregunta muy difícil de hacer", relató Varvitsiotis.
Lorenzino se desempeña en el cargo desde diciembre de 2011. Cercano al vicepresidente Amado Boudou, se declara hincha de Boca Juniors y "fanático" del grupo Los Redonditos de Ricota.