El ex ministro de Hacienda chileno y actual director del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI), Nicolás Eyzaguirre, protagonizó hoy junto al ministro de Economía de Argentina, Amado Boudou, una inusual discusión "callejera" en Estambul, en un intento por aplacar las diferencias del organismo con el manejo de las cuentas fiscales del vecino país.
Según informa el diario El Clarín de Buenos Aires, el secretario de Estado quedó de reunirse el martes en un hotel con el ex ministro de Lagos, quien había criticado la política fiscal, la fuga de capitales y el control monetario del Gobierno de Cristina Fernández. Ambos personeros se encuentran en Turquía en el marco de la reunión anual del FMI y el Banco Mundial.
Sin embargo en un hecho insólito, Boudou lo recibió en la calle, específicamente en la esquina de Sehit Muhta, frente al hotel. "Estuviste muy duro ayer", fue la primera frase de Boudou a Eyzaguirre.
El medio trasandino asegura que hubo gestos adustos. Mucho movimientos de manos enfatizando frases. En un momento, Eyzaguirre se tomó la barbilla, como con preocupación. Y Boudou parecía estar haciendo jueguitos de pelota para la tribuna que lo observaba sorprendida.
El medio trasandino asegura que hubo gestos adustos. Mucho movimientos de manos enfatizando frases. En un momento, Eyzaguirre se tomó la barbilla, como con preocupación. Y Boudou parecía estar haciendo jueguitos de pelota para la tribuna que lo observaba sorprendida.
Según consigna El Clarín, se alejaron unos pasos sobre la calle empedrada, poblada de turistas. Personal de ceremonial argentino impidió acercarse a escucharlos, aunque el tono airado se reflejaba en las caras de ambos. Una ráfaga de viento trajo una frase del funcionario del Fondo: "Entonces, si no quieres, yo no voy a Buenos Aires". Y luego se lo escuchó decir: "Sería una misión de bajo perfil". En ambos casos, refiriéndose, aparentemente, al viaje de una delegación del Fondo para hacer la supervisión que marca el artículo IV del estatuto, y que es obligatoria para todos los socios del FMI, aunque Argentina no la acepta desde 2006.