Una vez más, el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, criticó las consecuencias del actual modelo educacional y de las pruebas estandarizadas como el Simce.
"Las escuelas para sobrevivir tienen que tratar de transformarse en una fábrica de embutidos (...), donde se le pongan contenidos que los niños puedan contestar y, así atraer a nuevos clientes, cobrar y sobrevivir", dijo ayer.
El secretario de Estado hizo esta crítica ante un centenar de ex dirigentes estudiantiles, con quienes sostuvo una reunión privada (ver nota principal).
"No hay dos opciones: o nosotros cambiamos el contrato social y hacemos de la educación un derecho para todos y todas, con educación de calidad, o este país no tiene destino. Este país no se va a poder desarrollar, va a caer una vez más en la trampa de los ingresos medios, como nos ha ocurrido muchas veces, como le ha ocurrido a Argentina", afirmó.
Eyzaguirre enfatizó que si no se hacen cambios profundos al modelo de educación que hay en Chile, "el país se va a enfrentar a sí mismo, porque, evidentemente, no va a ser capaz de dar satisfacción a los sueños de las familias".
En una de sus intervenciones, aprovechó de bromear ante los ex dirigentes estudiantiles. "Yo podré tratar de hacer alguna cosa ahora hasta que me saquen, pero son ustedes, chiquillas y chiquillos, los que la van a llevar, y espero que por mis hijos y sus hijos lo logren", señaló.
En ese contexto, el titular de Educación comentó que todo el proceso impulsado por el gobierno de Michelle Bachelet en materia educacional podría demorar más de diez años. "La tarea es enorme. Yo calculo que esto nos va a tomar posiblemente más de una década conseguirlo, pero está claro que si no lo hacemos ahora, esto nos va a cobrar una cuenta demasiado grande", advirtió.
Este fin de semana, el ministro salió a terreno a defender el proyecto que busca terminar con el lucro, el copago y la selección, visitando escuelas en las comunas de La Granja y Lo Prado, donde conversó con apoderados, alumnos y profesores.
El próximo martes, el Ministerio de Educación debiera presentar las indicaciones a la iniciativa, de acuerdo con el plazo fijado por la Comisión de Educación de la Cámara, las que, según ha dicho Eyzaguirre, no van a modificar el corazón de la reformaUna vez más, el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, criticó las consecuencias del actual modelo educacional y de las pruebas estandarizadas como el Simce.
"Las escuelas para sobrevivir tienen que tratar de transformarse en una fábrica de embutidos (...), donde se le pongan contenidos que los niños puedan contestar y, así atraer a nuevos clientes, cobrar y sobrevivir", dijo ayer.
El secretario de Estado hizo esta crítica ante un centenar de ex dirigentes estudiantiles, con quienes sostuvo una reunión privada (ver nota principal).
"No hay dos opciones: o nosotros cambiamos el contrato social y hacemos de la educación un derecho para todos y todas, con educación de calidad, o este país no tiene destino. Este país no se va a poder desarrollar, va a caer una vez más en la trampa de los ingresos medios, como nos ha ocurrido muchas veces, como le ha ocurrido a Argentina", afirmó.
Eyzaguirre enfatizó que si no se hacen cambios profundos al modelo de educación que hay en Chile, "el país se va a enfrentar a sí mismo, porque, evidentemente, no va a ser capaz de dar satisfacción a los sueños de las familias".
En una de sus intervenciones, aprovechó de bromear ante los ex dirigentes estudiantiles. "Yo podré tratar de hacer alguna cosa ahora hasta que me saquen, pero son ustedes, chiquillas y chiquillos, los que la van a llevar, y espero que por mis hijos y sus hijos lo logren", señaló.
En ese contexto, el titular de Educación comentó que todo el proceso impulsado por el gobierno de Michelle Bachelet en materia educacional podría demorar más de diez años. "La tarea es enorme. Yo calculo que esto nos va a tomar posiblemente más de una década conseguirlo, pero está claro que si no lo hacemos ahora, esto nos va a cobrar una cuenta demasiado grande", advirtió.
Este fin de semana, el ministro salió a terreno a defender el proyecto que busca terminar con el lucro, el copago y la selección, visitando escuelas en las comunas de La Granja y Lo Prado, donde conversó con apoderados, alumnos y profesores.
El próximo martes, el Ministerio de Educación debiera presentar las indicaciones a la iniciativa, de acuerdo con el plazo fijado por la Comisión de Educación de la Cámara, las que, según ha dicho Eyzaguirre, no van a modificar el corazón de la reforma.