El ministro de finanzas japonés, Yoshihiko Noda, se fue contra las progresivas alzas del yen, al afirmar que estaba dispuesto a actuar decididamente contra cualquier movimiento brusco mientras la fortaleza del yen amenace con perjudicar a la frágil economía exportadora.

Noda hizo estos comentarios cuando el yen seguía subiendo frente al dólar para acercarse a los niveles previos a los que exhibía cuando las autoridades japonesas intervinieron en el mercado cambiario el 15 de septiembre por primera vez en seis años y medio.

El yen transaba en 82,27 unidades por dólar, su menor nivel desde el 12 de noviembre, aunque se mantenía por debajo de su máximo de 15 años en torno a las 81 unidades por dólar, pero menos que los 82,87 vistos poco antes de que Japón interviniera.

"En los últimos días, o hace una semana, las operaciones han sido débiles, pero el movimiento ha sido hacia un sólo lado, y yo observaré de cerca los movimientos del mercado a fines de año y los primeros días del próximo", afirmó Noda en rueda de prensa.

"Nuestra postura se mantiene igual, de que tomaremos medidas decisivas cuando ocurran movimientos bruscos", agregó.

Noda aseguró que la situación se habría deteriorado más si Japón no hubiese intervenido el 15 de septiembe.

Producción, empleo y precios

La producción industrial de Japón creció un 1% en noviembre, su primera alza en seis meses, en una señal de que las empresas están aumentando la actividad con expectativas de un repunte en la demanda global a principios del próximo año.

Las manufactureras consultadas por el Ministerio de Economía, Comercio e Industria esperan que la producción crezca un 3,4% en diciembre y un 3,7% en enero.

A su vez, las ventas minoristas niponas aumentaron un 1,3% interanual en noviembre, mucho más que lo previsto por el mercado de un incremento del 0,2%.

Hoy se informó también que la tasa de desocupación de Japón permaneció sin variaciones en noviembre en 5,1%, pero la disponibilidad de empleo mejoró, aunque las cifras aún sugieren que las empresas son cautas de incrementar sus nóminas por lo incierto de la economía, que sigue mostrando deflación.

En tanto, los precios subyacentes al consumidor de Japón cayeron un 0,5% en noviembre en la comparación interanual, en su vigésimo primer mes consecutivo de baja, lo que ilustra que el país está subsumido en la deflación producto de la débil demanda doméstica.