El conflicto entre Anglo y Codelco, la judicialización de proyectos, el acceso a la energía, junto a la capitalización de la principal empresa estatal del país fueron algunos de los desafíos que el ministro de Minería, Hernán de Solminihac, enfrentó durante su gestión. A pocas semanas del cambio de gobierno, el secretario de Estado hace un balance de su trabajo. Asegura que la cartera de proyectos aumentó fuertemente y que hubo avances importantes en la institucionalidad ambiental. Frente al próximo gobierno, sostiene que un cambio impositivo podría afectar las inversiones del sector si es que se introducen modificaciones significativas en la estructura tributaria.

¿Cuáles fueron los principales desafíos con los que se encontró al asumir la cartera?

Preocupaba el desarrollo de las inversiones y todos los desafíos que éstas traían, como el medioambiente y la sustentabilidad. Otro de los desafíos importantes tiene que ver con la energía. Después está el plan hídrico, el capital humano, el de las comunidades y el de la productividad y de la competitividad.

¿Qué balance se hace al respecto?

Estamos contentos con todo lo que se ha hecho. Prácticamente duplicamos la cartera de inversiones que estaba disponible hace cuatro años, porque pasamos desde una cartera de alrededor de US$ 59 mil millones que había en todo tipo de proyectos el año 2010, a una de prácticamente US$ 112 mil millones en distintas etapas.

Pero varios proyectos enfrentan dificultades judiciales y de acceso a la energía que retrasan su materialización...

Son varios los factores que deben estar alineados para que los proyectos se puedan materializar. Vimos que estos proyectos por US$ 112 mil millones están en distintas etapas. El último catastro que hizo Cochilco es para 2021, por lo tanto, probablemente cada proyecto se realizará en su propio mérito. Ojalá se vayan materializando, pero es difícil asegurarlo en este momento, porque hay variables externas que no dependen exclusivamente de una empresa o un país.

¿Ve algún efecto en el sector a partir de los cambios tributarios que ha planteado el nuevo gobierno?

Al conversar con la industria uno se da cuenta de que lo que más se valora de un país es la estabilidad y que las reglas del juego sean lo más estables posibles en el largo plazo. Por lo tanto, si los cambios son muy significativos, las empresas van a analizar las formas de enfrentar sus inversiones. Pero hay que esperar a ver cuáles son esos cambios antes de emitir una opinión definitiva

En esa lógica, ¿eliminar el DL 600 sobre estatuto de la inversión extranjera es un cambio significativo?

Una parte significativa de las industrias minera y energética usa el decreto DL 600 para realizar sus inversiones. Si eso se disminuye, modifica o se elimina, claramente son cambios importantes en las reglas del juego que podrían tener alguna significación en las inversiones que están pensando estos sectores.

¿Cuáles serán los mayores retos que tendrá la nueva ministra Aurora Williams?

Si hay que focalizarse en los principales, se podría decir que el tema energético es uno, aquí hay que enfrentar la disponibilidad, el costo y la transmisión. También deberá seguir trabajando en las relaciones con las comunidades, para que los proyectos se puedan materializar en armonía.

CODELCO

Y en relación a Codelco, ¿cuáles son los desafíos?

Codelco tiene desafíos importantes por materializar. Hemos apoyado con fuerza los proyectos de desarrollo que necesita. También hemos dicho que se le van a entregar los recursos que sean necesarios para su desarrollo, primero usando los recursos internos y, segundo, a través de créditos a los que pueda acceder sin perder su grado de inversión. El nuevo gobierno tendrá que ver si sigue con esa política que permite garantizar el desarrollo de Codelco.

Pero, ¿se debería revisar la fórmula de capitalización?

Hemos sido sumamente claros en el sentido de decir que cuando Codelco necesite recursos éstos van a estar. Si alguien estima que se puede evaluar un elemento distinto, es importante que lo haga, pero viendo que los recursos del país son limitados y que hay muchas necesidades. Cuando se colocan inversiones en un lado se deja de ponerlas en otros.

¿Sería positivo fijar un modelo plurianual?

Es algo que hay que ver. Un ministro de Hacienda tiene que estar detrás de una decisión de esa naturaleza, porque afectaría las políticas públicas en general. Lo importante es que aseguremos el desarrollo de Codelco en los proyectos que sean rentables para la empresa y el país.

¿Existe riesgo de que la empresa pierda su primer lugar como productora de cobre?

Esperamos que siga liderando, pero el objetivo de liderar producción a cualquier costo tampoco es una decisión que uno debería tomar. Se debería liderar en el aporte que hace al país, por lo que debería ser muy eficiente en su producción.

¿Qué enseñanza dejó la contingencia con Anglo American?

Fue una operación bastante particular. Es difícil que se repita una condición similar, pero la lección que dio es que hay que dejar que el gobierno corporativo funcione. En este caso funcionó y llevó adelante una negociación que fue muy compleja. El trabajo que se dio fue positivo, similar a lo que se hubiera hecho si se hubiera ejercido directamente la opción en un inicio, desde el punto de vista de los resultados económicos. También se obtuvo un compromiso de trabajo conjunto con Anglo a futuro, lo que significa un beneficio importante.

¿Cómo quedó la imagen del país?

Quedó bien. Aquí se demostró que funcionó la institucionalidad y que Chile es visto como un país serio, en donde se cumple la institucionalidad.

¿La judicialización de proyectos ha afectado esa visión?

Esta dentro de las variables que existen en el país. Esperamos que con las nuevas reglamentaciones que estaban disponibles, y que con los nuevos instrumentos que han aparecido, como los tribunales ambientales, la consulta de los pueblos originarios funcione mucho más eficientemente el desarrollo de los proyectos.