Tratar de abrir un espacio de diálogo "con confianza, sin protestas y sin violencia" será uno de los pasos a seguir entre el Ministerio de Vivienda y los pobladores de Dichato, quienes exigen al gobierno que entregue soluciones a las familias damnificadas tras el terremoto y posterior tsunami del 27/F.

Así lo destacó el titular de la cartera Rodrigo Pérez a Radio Cooperativa, asegurando que "vamos a seguir conversando para ver cuáles son sus demandas".

Con respecto a la demora en la reconstrucción de la zona, Pérez explicó que "Dichato fue muy golpeado por el tsunami", por lo que el levantamiento del pueblo "tiene que contemplar el riesgo de tsunami, no se puede llegar y reconstruir la ciudad tal como estaba, sin considerar que puede ocurrir un evento similar nuevamente".

"Hubo que hacer una serie de trabajos bastante complejos con la Universidad Católica, como modelaciones de tsunami y diseños de obras de mitigación que incluye muros, movimientos de tierra, muros rompeolas y un parque, que persiguen lograr que, si ocurre un evento de esa naturaleza nuevamente, no sea una ola que arrase con todo, sino que reduzca la velocidad y altura de la ola y", agregó.

"Ojalá podamos decir que sea más bien una inundación y que las familias que tienen que evacuar, puedan volver a sus hogares y no tengan que esperar dos años para que se haga todo de nuevo", argumentó el secretario de Estado, mencionando que "todo ese trabajo, obviamente, atrasa el proceso de reconstucción".

Pérez señaló además que ya se están construyendo dos conjuntos habitacionales "que son El Sauce y El Molino, para 200 viviendas". "También se están construyendo 250 casas en sitios propios, hay pocas que están en construcción, pero ya partió el proceso. Y ya se licitó el proyecto de reconstrucción de un tercer conjunto que está en el borde costero, inicialmente para 120 departamentos. Si hay más demanda, se puede duplicar la capacidad de ese conjunto", dijo, adelantando que ya se definió el terreno que se va a expropiar para los habitantes de la aldea El Molino.

Frente a la reacción de los pobladores que han organizado una serie de protestas, y a la última manifestación que dejó al menos cinco heridos y un detenido por enfrentamientos con Carabineros, la autoridad afirmó que "entendemos que cualquier día que ellos pasen en condición de vulnerabilidad en el campamento, es un día duro, y por eso también hemos entregado a las familias apoyo psicosocial, trabajos con los niños y con los dirigentes"

"Se han transferido cantidades importantes de recursos a los municipios para que hagan las mejoras que los propios vecinos reclaman en las aldeas y tenemos un equipo que está reparando cualquier cosa que haya que reparar ayudando a las familias", añadió, explicando que "lamentamos las protestas, creemos que ojalá estemos abriendo un diálogo con los vecinos, pero el problema de Dichato va más allá del tema vivienda, Dichato es una localidad que vive del turismo y con lo que ocurrió, está duramente afectado".