El vicepresidente de la República, Mario Fernández ya se encuentra en Ovalle, en la región de Coquimbo donde se reunió con alcaldes para decir la asignación de recursos ante esta emergencia que afecta la zona centro norte del país.

Tras realizar un sobrevuelo por la Ovalle, Fernández aseveró que "lo más complicado es el suministro de agua potable, por ahora. Se está trabajando en una fórmula". Específicamente "se ve claramente que hay unos estragos, especialmente cortes de caminos en la zona de Marquesa. Desde arriba se ve que el corte produce un aislamiento de una zona bien importante".

Debido a los daños que se han producido por estas intensas lluvias y además el rebalse del embalse Recoleta y que produjo el corte de agua de 26.600 hogares, Fernández declaró que  "vamos a tomar medidas adecuadas para que los municipios puedan disponer de los recursos necesarios", y que "decretar un estado de excepción constitucional no precede en esta situación, pero eso no quiere decir que no se pueda disponer de un estado específico para asignar recursos".

Respecto al colapso del embalse Recoleta, la autoridad reconoció que "no había ninguna posibilidad de resistir" por el tamaño del muro, y que "vamos a ver de donde viene esta falla".