El ministro de Salud, Jaime Mañalich, luego de una reunión con la comunidad de Puchuncaví, anunció que este lunes se reabrirá la escuela La Greda, tras haber sido cerrada al menos una semana por casos de intoxicación, tanto en los alumnos como de profesores. Esto producto, de la emanación de una nube de gas tóxico proveniente de la fundición y refinería Ventanas de Codelco.
En el encuentro participaron además de Mañalich, la ministra de Medio Ambiente, el intendente Raúl Celis, el alcalde de Puchuncaví, y parlamentarios de la Quinta Región.
La decisión de reabrir la escuela - con excepción de las salas 10 y 11 - pasó por considerar suficientes las medidas de mitigación por parte de las autoridades y que desde febrero realizaba Asiva, cuando el ISP confirmó altos niveles de arsénico y cobre, entre otros metales pesados, en salas y suelos de la escuela La Greda.
El plan contempla un sellado de salas, cambio de siete centímetros en la tierra, y recambio de la pintura lavable.
INDUSTRIAS
En el gremio de industriales dijeron que dicho plan vence este 31 de marzo y que debió suspenderse tras el cierre del colegio. Por ello con esta reapertura completarán esas tareas y en una segunda fase, en abril, realizarán el cambio de techumbre y de la tierra de los patios del colegio.
Informaron además que las industrias del complejo Ventanas ya comenzaron la construcción cobertizos y cercos de lona para los materiales particulados en los 12 patios de acopio existentes en el lugar. "El objetivo de estos cobertizos es disminuir las fuentes de emisión del particulado que ha estado llegando a la escuela de los distintos patios del complejo".
Entre ellos están los que levanta Puerto Ventanas para cercar el concentrado de cobre de Codelco y el petcoke de Enap que acopia en sus recintos y que en diciembre le valieron un sumario sanitario -aún en curso- por el vertimiento de este material al estero Campiche. Episodio que se repitió en enero.
A largo plazo, los industriales apoyarán económicamente el desarrollo de estudios de suelo, agua, y aire en Puchuncaví y Quintero, siguiendo las acciones que se ha propuesto el Ministerio de Medio Ambiente. Ya en 1992 Enami invirtió en esta zona 250 millones de dólares en su plan de descontminación.