El ministro de Transportes Felipe Morandé lanzó hoy, en la explanada de la Estación Mapocho, 15 medidas para mejorar el sistema de Transporte Público de Santiago.

El paquete de anuncios -que se concretará en un lapso de 12 meses a partir de hoy- contempla un inédito programa de consultas ciudadanas, ajustes a más de 150 recorridos para que los viajes sean más directos y con menos transbordos, además de la renovación de 800 buses y el compromiso de que este año la tarifa no seguirá subiendo, entre otros.

El plan considera también la puesta en marcha de la primera vía rápida de Transantiago que atravesará cuatro comunas, permitiendo asegurar el tiempo de viaje entre Peñalolén y Santiago Centro con una infraestructura de primer nivel que incentivará el uso del transporte público.

"Vamos a solucionar este mega error de los gobiernos anteriores y a devolver la dignidad a los usuarios del Transantiago y lo haremos con acciones reales, concretas y que irán en directo beneficio de los usuarios", indicó el ministro Morandé.

"Sabemos que la frecuencia de los servicios, las rutas de los recorridos, la tarifa y los transbordos son las demandas más sensibles para los usuarios y es allí donde hemos puesto nuestro principal esfuerzo", expresó.

De hecho, el plan de medidas incorpora un sistema de mensajes de texto que permitirá a los usuarios conocer los horarios de llegada de los buses en los cinco troncales y un alimentador, a la vez que se mejorará el diseño de 120 zonas pagas.

Pero además, el programa anunciado por el titular de Transportes incluye un sistema que permitirá tener frecuencias fijas durante las noches y los fines de semana, de modo que la gente sepa cuánto esperar para tomar cada bus.

A esto se suma la duplicación de la capacidad fiscalizadora del ministerio con la finalidad de reducir la evasión y un cambio en la manera de controlar a los operadores, con el fin de entregar un mejor servicio y poner fin a los "trencitos" de buses que provocan esperas innecesarias a las personas.

También el plan incluye la instalación de 670 nuevos paraderos y la actualización de 10 mil señales de paradas, que mejorarán la información sobre recorridos y su visibilidad tanto para los pasajeros como para los conductores de buses.