Los ministros de Finanzas de la zona euro aprobaron el lunes un programa de emergencia a tres años por 78.000 millones de euros para Portugal y dijeron que Lisboa pediría a los tenedores privados que mantuvieran su exposición a la deuda del país.
Este es el tercer rescate de un país de la zona euro en el último año, después de los entregados a Grecia e Irlanda.
Se trata de la primera vez que un país se compromete a pedir a los inversores privados que no vendan sus bonos sobre una base voluntaria.
En un comunicado, la UE dijo que el programa cubriría las necesidades de financiamiento de Portugal por hasta 78.000 millones de euros. La cantidad será repartida en partes iguales por el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera y por el Fondo Monetario Internacional.
"Al mismo tiempo, las autoridades portuguesas alentarán a los inversores privados a mantener sus exposiciones a la deuda sobre una base voluntaria", señaló el comunicado.
También se espera que Portugal se embarque en un ambicioso programa de privatizaciones para fortalecer sus finanzas públicas.
Ambas exigencias fueron puestas por Finlandia como condiciones para apoyar el acuerdo, que debe ser aprobado por los 17 países de la zona euro.
Tras negarse durante meses, el gobierno portugués debió aceptar un rescate luego que las alzas en los rendimientos de sus bonos tornaran prohibitivo financiarse en los mercados.