La agencia Moody's subió su calificación sobre la deuda de Chile, elogiando su resistencia financiera pese a la desaceleración económica mundial y al fuerte terremoto que sufrió el país en febrero.   

Moody's subió la calificación un escalón a "Aa3", desde "A1", el cuarto peldaño más alto dentro de la escala de grado de inversión.

El panorama de la calificación es estable, lo que sugiere que en los próximos 12 a 18 meses no se esperan cambios en la nota.    

"Años de sólidas políticas macroeconómicas, incluyendo un superávit fiscal estructural, posicionaron a Chile de buena manera para enfrentar la crisis económica global y las consecuencias financieras del terremoto", dijo Moody's.

"Mayor flexibilidad fiscal combinada con una sólido marco institucional compensan con creces la relativa debilidad de Chile, un nivel de desarrollo económico más bajo que todos los otros países calificados en Aa", dijo el vicepresidente de Moody's Gabriel Torres. "El ingreso per cápita de Chile de US$14.500, ajustado para comparaciones internacionales, es menos de la mitad del promedio de US$34.000 para los países calificados en Aa".

El terremoto del 27 de febrero causó la muerte de centenares de personas y golpeó las industrias forestal, frutícola, pesquera y vinícola de la región centro-sur de Chile. La enorme minería del cobre no fue afectada.

"Se juntaron dos cosas: Por un lado que Chile demostró tener una gran flexibilidad y el terremoto fue un gran test de ello, y mostró que el gobierno tiene un montón de opciones para financiar la reconstrucción y las puede utilizar. Sólo los ahorros en los fondos podrían haber pagado los costos y así y todo decidió no utilizarlo", explicó a La Tercera Gabriel Torres.

El ministro chileno de Hacienda, Felipe Larraín, alabó la decisión de Moody's considerándola un voto de confianza para la política fiscal que desarrolla el país.

"Es muy buena noticia para el Gobierno. Si se concreta nuestra intención de colocar los bonos, podemos aspirar a mejores condiciones, con mejores calificaciones de riesgo", afirmó a Reuters en una entrevista telefónica.

El Gobierno chileno planea emitir bonos soberanos por unos 1.500 millones de dólares para recaudar recursos para un programa de reconstrucción tras el sismo y tsunamis que golpearon al país.

Un incremento en la calificación crediticia usualmente lleva a que el país pueda obtener préstamos más baratos en los mercados internacionales.

Moody's destacó que la carga de deuda de Chile, como proporción del Producto Interno Bruto, es comparativamente baja con países que tienen calificaciones similares.

"La sólida posición financiera del Gobierno chileno sobresale cuado se compara con otros países con calificaciones similares", escribió el analista de Moody's Gabriel Torres. "El ratio deuda-PIB promedio en países calificados 'Aa' fue un 36% el año pasado, pero sólo un 6% para Chile", agregó.

"De manera similar, el ratio deuda-ingresos de Chile del 25% se compara favorablemente con la mediana de 88% en países 'Aa'", indicó Torres.

El peso chileno anotaba ganancias después de la mejora en la calificación.

El último cambio en las calificaciones de Chile había sido el 23 de marzo del 2009, cuando Moody's asignó un panorama positivo para la deuda del país.