El Presidente de Bolivia, Evo Morales, acusó hoy al Mandatario estadounidense, Barack Obama, de actuar como "gendarme" y "patrón" por haber mantenido el veto a su país para exportar a EE.UU. con los beneficios aduaneros de programa ATPDEA.

"Quiero decirle con mucho respeto al presidente Obama: si en Estados Unidos ha cambiado la fisonomía de los gobernantes, no han cambiado las políticas del Imperio", dijo Morales en una declaración ofrecida en Palacio de Gobierno.

Morales expresó su "decepción" por la decisión de la Casa Blanca de mantener suspendida en el caso de Bolivia la vigencia de la Ley de Promoción Comercial Andina y Erradicación de Droga (ATPDEA), ofrecida a cambio de resultados en la lucha antidroga.

La suspensión había sido resuelta por la Administración de George W. Bush, en diciembre de 2008, con el argumento de que Bolivia no había colaborado en la lucha contra el narcotráfico.

En los últimos días, el Gobierno de Morales insistió en solicitar a Obama la reversión de esa medida por el daño que causa a la industria boliviana y confiaba en que la decisión podía darse el martes, al cumplirse un plazo de evaluación en Washington.

Morales afirmó que "Obama mintió a Latinoamérica" cuando dijo en la V Cumbre de las Américas, que se celebró en Trinidad y Tobago que no hay socios mayores ni menores en el continente.

"Ahora no solo hay un socio mayor, hay un patrón que observa la Constitución Política del Estado boliviano. Hay un patrón, hay un gendarme que cuestiona la nacionalización (de hidrocarburos), hay un patrón que, además, observa políticas laborales en Bolivia", sostuvo el mandatario.

Morales tildó de "calumnias, mentiras y falsas acusaciones" los argumentos expuestos por el Gobierno de Obama para suspender las preferencias arancelarias a Bolivia.

Según Morales, el Ejecutivo estadounidense observó un artículo de la nueva Constitución Política del Estado boliviano que establece la expropiación de propiedades que no cumplan con una función social.

La Casa Blanca, añadió, cuestionó, además, la nacionalización de los hidrocarburos iniciada en 2006 y el retiro de Bolivia del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) en octubre de 2007, para evitar arbitrajes.

Los resultados de la lucha contra el narcotráfico en Bolivia y la expulsión de la oficina antidrogas estadounidense DEA en 2008 también fueron observadas por Washington.

Según un informe reciente de las Naciones Unidas, los cultivos de hoja de coca en Bolivia se incrementaron el año pasado en 6 por ciento con respecto a 2007 y la potencialidad de la producción de cocaína creció en 9 por ciento.

El presidente boliviano reconoció hoy el incremento de las plantaciones de coca, pero sostuvo que su Administración está "combatiendo este tema".

Morales remarcó que la suspensión de preferencias arancelarias "es una acción netamente política" y anunció que mañana explicará qué medidas asumirá su Ejecutivo para apoyar a los exportadores bolivianos que perdieron el beneficio.

"Son apenas 25 millones de dólares de pérdida. Quiero que sepan: la dignidad de los bolivianos no cuesta 25 millones de dólares", advirtió el mandatario.

El sector exportador boliviano anticipó el martes su resignación por la suspensión de la ATPDEA que la considera definitiva y pidió a Morales que negocie con Estados Unidos un acuerdo comercial.

La suspensión de la ATPDEA ya repercutió en un descenso del 14 por ciento en las ventas bolivianas a EE.UU. y en la pérdida de más de 2.000 empleos en una empresa fabricante de textiles, que es la mayor exportadora nacional a ese mercado.