El Presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo hoy que no pedirá perdón al Gobierno de Perú por haber calificado de "genocidio" los enfrentamientos en la región amazónica de ese país, en los que murieron al menos 34 personas, entre policías e indígenas.

"He estado escuchando a algún ministro de la hermana república del Perú que me dice que pida perdón. Cuando se trata de defender la vida, no hay nada por qué pedir perdón", declaró hoy el mandatario.

La cancillería del Perú espera una disculpa del Gobierno boliviano luego de que Naciones Unidas señalara esta semana que "no existen los elementos" para hablar de un genocidio de los indígenas de la Amazonía peruana.

El Gobierno de Lima llamó el pasado lunes a consultas de forma indefinida a su embajador en La Paz, Fernando Rojas, en señal de protesta y malestar con Morales por sus declaraciones.

PIDEN ENTREGA DE MINISTROS
El Ejecutivo boliviano condicionó la recomposición de las relaciones bilaterales a que la administración de Alan García "entregue" a los tres ex ministros acusados de genocidio en Bolivia asilados en Perú, señaló hoy el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, en declaraciones a la radio estatal Patria Nueva.

"Si el Gobierno peruano quiere mejorar sus relaciones con Bolivia, lo primero que tiene que hacer es entregar a las autoridades bolivianas a los ex ministros de Gonzalo Sánchez de Lozada que se encuentran ahora protegidos por el Gobierno del Perú", dijo.

Llorenti responsabilizó exclusivamente al Ejecutivo peruano por el deterioro de las relaciones bilaterales y afirmó que Bolivia sufrió "una serie de agresiones" por parte de Lima.

Los Gobiernos de Morales y García tienen diferencias ideológicas en materia política y económica, que incluso llegaron hasta la Comunidad Andina de Naciones, bloque del que ambos países son miembros.