En su primer día como presidente electo de Egipto, Mohamed Morsi, mantuvo hoy coloquios y reuniones políticas para tratar de desatar los nudos que todavía lo dividen con los militares y que impiden anunciar una fecha de asunción.

El primer Presidente civil elegido libremente en décadas visitó el palacio presidencial de Heliopolis, donde hasta febrero pasado residía Hosni Mubarak, el ex hombre fuerte que ejerció el poder por tres décadas. 

El primer acto público del nuevo Presidente debería producirse ante el Parlamento, pero visto que el órgano legislativo fue disuelto por el Consejo Militar tras la sentencia de la corte constitucional, la solución propuesta sería jurar ante la misma corte. Ello sería para Morsi reconocer implícitamente el hecho de que el Parlamento no existe más.

Hasta esta mañana la cúpula de los Hermanos Musulmanes, del partido Justicia y Libertad de Morsi, insistía que la jura será en el Parlamento. Pero en la noche, el dirigente Sobhi Saleh, de la misma fuerza política, se desdijo en diálogo con los periodistas y aseguró que la jura será en la Corte.

Morsi hoy se reunió con el jefe del Consejo Militar, el general Hussein Tantawi, el jefe del estado mayor de las fuerzas armadas, Sami Annan, y los otros miembros de la junta militar, que le aseguraron que las armas castrenses estarán al lado del nuevo presidente y cooperarán para restablecer el orden.

Pero permanece sobre el tapete la medida dispuesta por los militares en la declaración constitucional de marzo pasado luego del congelamiento de la Constitución de Mubarak, con la cual los militares se auto atribuyeron varios poderes, entre ellos el legislativo, reduciendo de hecho los del nuevo Presidente.

En espera de que se redacte y apruebe con un referendo la nueva Constitución, el jefe del Consejo Militar sigue siendo el comandante en jefe de las fuerzas armadas y ministro de Defensa. Incluso en la nueva carta Magna los militares podrán intervenir pidiendo a la Constituyente modificar uno o dos artículos. 

La tensión pasa también por la formación del primer gobierno dispuesto por un presidente electo democráticamente.

En su primer discurso televisivo a la nación, Morsi prometió que será el "Presidente de todos los egipcios" y la formación de su gabinete demostrará si las palabras se corresponden con los hechos.  Hace dos días, Mohamed el Baradei, que renunció a la carrera presidencial en enero pasado, se reunió con Tantawi y según trascendidos en la prensa podría ser el primer ministro.

En tanto, un grupo de activistas creó el "Morsimetro", una página en Facebook para verificar si el nuevo presidente egipcio mantiene sus promesas en los primeros días de gobierno. Ya recibió casi 33 mil expresiones "me gusta".