El entrenador del Chelsea, José Mourinho, confirmó hoy que la doctora Eva Carneiro será marginada del encuentro del domingo ante el Manchester City después de las críticas que el portugués realizó al cuerpo médico del club.

Tal como se venía especulando en los medios británicos, Mourinho decidió apartar a Carneiro y también al fisioterapeuta Jon Fearn, con quienes se había enfadado por ingresar al campo de juego para atender al belga Eden Hazard en los últimos minutos del partido del sábado ante el Swansea.

"Lo primero que quiero decir es que tenemos un fantástico departamento médico liderado por el doctor Paco Biosca, tengo una buena relación con ellos", dijo Mourinho en una conferencia de prensa en la que leyó un texto que había preparado.

"Jon Fearn y la doctora Carneiro no estarán en el banco, pero eso no significa que el domingo sea el resto de nuestras carreras. Es mi decisión", agregó el entrenador portugués.

"El banco es mi decisión, mi responsabilidad. Cada semana tomo una decisión, debo elegir. Tengo siete asistentes, pero sólo cuatro pueden ir al banco. Tenemos cuatro utileros y sólo uno está en el banco", añadió.

Pero la calma tuvo un final: cuando los periodistas quisieron consultar más detalles, el DT se enfureció. "Si queréis hablar de fútbol, estoy aquí para vosotros, de lo contrario no lo estoy. A los que les guste el fútbol que se queden, los que no que no me pregunten o se vayan", fue el mensaje.

Mourinho se enfadó con los médicos durante los últimos minutos del partido que el Chelsea empató 2-2 con el Swansea.

Eden Hazard se quejó de un golpe y la doctora Carneiro salió a atender al belga, por lo que el futbolista tuvo que abandonar el césped unos minutos. El conjunto londinense llevaba jugando prácticamente toda la segunda parte con diez jugadores por la expulsión de Thibaut Courtois y disputó parte de los instantes finales con nueve hombres, lo que provocó la furia de Mourinho.

"Incluso aunque seas médico y estés en el banquillo tienes que entender el juego. Yo estaba seguro de que él (Hazard) no tenía nada, sólo le dieron un golpe y estaba cansado. Pero mi departamento médico fue naif", dijo tras el encuentro Mourinho, en una reacción que causó revuelo en el fútbol inglés.

Hoy, el portugués intentó bajar el tono a la polémica y negó que la situación pueda alterar la armonía del equipo. "Si alguno piensa que un desacuerdo entre dos miembros del departamento médico y el entrenador puede afectar la preparación de un partido no entiende nada de fútbol", opinó.

La reacción de Mourinho generó múltiples críticas en el Reino Unido, entre ellos la del técnico del Arsenal, el francés Arsene Wenger.

"Las reglas son claras. Si el árbitro da la indicación para que los médicos entren, entonces pueden entrar", opinó hoy el entrenador de los "gunners".