Muy disgustado se mostró José Mourinho por el arbitraje y en su análisis le dio poca importancia al escaso juego ofensivo de su equipo.
Para el DT "ha sido un partido equilibrado cuando estuvimos once contra once, y después, como pasa muchísimas veces, nos vimos con diez y entonces fue misión casi imposible".
El portugués incluso dijo sentirse "aburrido" por la situación. "Estoy cansado de preparar partidos contra el Barcelona con diez. En cada charla debo hacerlo".
Mourinho apuntó a la disparidad de criterio señalando que "no entiendo la razón por la que Alves no vio la segunda amarilla", luego de que este fuera el responsable de la falta (que no fue) que significó el penal a favor del Madrid.
El técnico insistió en la situación y agregó que "me gustaría jugar con ellos once contra once, pero tanto en España como en Europa es misión imposible".
"Vamos con la esperanza de encontrar un árbitro que tenga el mismo criterio para los dos equipos, aunque sabemos que jugamos contra un rival que tiene un control de la situación impresionante. A ellos no les pasa nada", manifestó sobre el partido por la Copa del Rey.
Por último, y pese al bajo nivel del Madrid, Mourinho aseguró que "nos vamos con sensaciones positivas, hemos intentado hacer bien las cosas y tenemos el reconocimiento de nuestra gente".