Fuera de la cancha, era la imagen más esperada de la tarde. Finalmente, el entrenador de Barcelona, Tito Vilanova, y su colega del Real Madrid, José Mourinho hicieron las paces y se saludaron antes del inicio del partido.
Este saludo ocurrió justo un año después de aquella agresión del luso contra el entonces asistente de Pep Guardiola, en el contexto de la vuelta de la Supercopa 2011-12.
Cabe recordar que, en esa oportunidad, Mourinho metió uno de sus dedos en el ojo a Vilanova, en medio de una discusión.
Hace poco, Vilanova dijo que "pasarán los años y lo peor es que esas imágenes quedarán", dijo Vilanova.