Uno de los 60 conscriptos que resultaron irradiados tras realizar funciones de seguridad y vigilancia en el reactor nuclear de La Reina y Lo Aguirre, en los años 1988 y 1989, falleció hoy a las 13:00 en la Clínica Alemana. Se trata de Manuel Mella Tapia (40) quien permanecía internado desde el 24 de noviembre pasado en el recinto de salud.
Mella hizo guardia en las centrales en 1989 y hace dos años se comenzó a sentir mal. Hace uno le diagnosticaron leucemia y esperaba un trasplante de médula.
Manuel Mella se suma a las anteriores muertes de soldados que custodiaron el centro nuclear y que fallecieron de insuficiencia respiratoria, cáncer a los huesos y dos por leucemia. En septiembre pasado 64 ex conscriptos de Curicó presentaron una millonaria demanda en contra del Estado y la Comisión Chilena de Energía Nuclear por el daño moral de que habrían sido objeto por las complicaciones a su salud.
2.512 conscriptos han vigilado las centrales en 35 años. Además 3,6 casos en 100 mil habitantes es la tasa nacional de muertes por leucemia. El caso de los soldados supera ese rango.
La central Lo Aguirre opera desde 1977 y La Reina desde 1974. La primera tiene una planta de irradiación multipropósito que esteriliza material quirúrgico y de alimentos. La segunda, produce elementos químicos radiocativos para terapias médicas.