Este miércoles será sepultado, en Villarrica, Carlos Spiess, el conocido empresario que fue víctima de la estafa realizada por la ex ejecutiva del Banco de Chile, Luz Ojeda, considerado uno de los engaños más grandes que se haya registrado en el país.
Complicaciones multisistémicas propias de sus 96 años de edad provocaron el deceso del acaudalado vecino de la zona lacustre.
Spiess hizo su fortuna en el norte del país transportando a los trabajadores de las minas. Luego obtuvo la concesión de la firma Ford y se trasladó a Villarrica, donde invirtió con éxito en bienes raíces.
Cercanos aseguran que la fortuna de Spiess supera los US$ 12 millones. Tras su deceso no dejó herederos directos, porque no tuvo hijos.
Antes, durante y después del juicio contra la ejecutiva el matrimonio Spiess Castillo vivió en forma austera en su antigua casona patronal del fundo "Primavera".