Mónica Weeks conoció a muchos hombres en su vida pero a sus 51 años dice que aún no ha encontrado a su "Barack".
Para Weeks y sus amigas, el nombre del Presidente Barack Obama se convirtió en la definición de un hombre negro que muestra integridad, personalidad y espiritualidad, que ama y valora a su mujer, y que hace de su familia una prioridad.
En otras palabras, es el tipo de hombre que muchas mujeres afroamericanas perdieron las esperanzas de encontrar.
Weeks asegura que es probable que todas las solteras que conoce estén buscando a su "Barack".
"El de verdad me hace pensar que es algo que se puede lograr", dijo Weeks, una madre divorciada que vive en Somerset, Nueva Jersey. "Para mujeres que ya son grandes y están buscando a un hombre, creo que podemos verlo y decir: 'No todo está perdido'".
La historia se repite entre mujeres negras de diferentes lugares. Todas dicen que la nueva palabra clave para referirse al Príncipe Azul se ha vuelto tan común que ya les han preguntado: "¿Has encontrado a tu Barack?", o ellas mismas han anunciado: "Estoy buscando a mi Barack".
El atractivo físico de Obama ha contribuido, claro, pero el Presidente causó un impacto especial en las mujeres afroamericanas, que lo consideran un "hombre afromericano ideal": es educado y habla bien, es alto y bien parecido, piensa en su familia y es ambicioso y además es un hombre práctico.
Las mujeres negras solteras llevan años consolándose unas a otras por lo que consideran una escasez de hombres negros que sean un buen partido. Ese dato está sustentado por las estadísticas.
La tasa de desempleo entre los afroamericanos de 20 años o más fue de 16,8%, mientras que la tasa nacional para hombres adultos fue de 9,8%. Las mujeres negras son más del doble de los hombres negros en las universidades y la mayoría de los bebés negros son hijos de madres solteras.
"Hay una gran cantidad de mujeres afroamericanas que mayormente han abandonado la búsqueda de un compañero", dijo Sheri Parks, una profesora asociada de Estudios Estadounidenses en la Universidad de Maryland. "Los hombres para ellas no están".
Tras tener que lidiar con hombres "extremadamente egocéntricos", Renee Breeden, una madre divorciada de 35 años, dejó de salir con afroamericanos. Ahora dice que ver a los Obama le renovó la esperanza.
"No se puede negar el amor que se tienen, y me hizo sentir: '¡Guau, todavía tengo esperanzas!'", dijo Breeden, secretaria y conductora de un programa de radio en Nueva York. "Todavía hay alguien que me puede mirar y ver lo que valgo".
Las mujeres negras aprecian que Obama tenga una esposa afroamericana y que respete sus aspiraciones educativas y profesionales. Según datos del censo, los hombres negros se casan más con gente de otra raza que las mujeres.
Además, la vida amorosa de la pareja presidencial está a la vista y, aunque los presidentes Bill Clinton y John F. Kennedy cautivaron a las mujeres, ninguno de los dos hubiera sido un gran marido, dijo Rich Hanley, director de un posgrado en periodismo en la Universidad Quinnipiac.