"La libertad de prensa no significa libertad de ofensa", dijo el primer ministro turco, Ahmed Davutoglu, antes de partir a Bruselas. Especialmente en lo que respecta al profeta, no puede considerarse libertad de prensa. "En este país no permitimos ofensas al sagrado profeta. Es una actitud muy clara y fundamental", dijo citado por la agencia de noticias Anadolu.

Davutoglu se refirió con estas palabras a las caricaturas de Mahoma aparecidas en la nueva edición de la revista Charlie Hebdo, salidas una semana después del atentado terrorista que sufrió su sala de redacción en París, donde murieron 12 personas, ocho periodistas y dos policías.

El primer ministro árabe señaló que en Turquía existe una gran sensibilidad en lo que concierne a ese tema por lo que publicar caricaturas ofensivas en esas circunstancias constituye una provocación.

El diario nacionalista de izquiera Cumhuriyet imprimió el miércoles en su edición impresa la portada del semanario francés, que muestra a Mahoma llorando, en tamaño pequeño sobre dos columnas. Un tribunal ordenó además el bloqueo de cuatro páginas de Internet que publicaban la portada, entre otros el portal T24. Sin embargo esta mañana los usuarios podían acceder hoy a esas páginas.

El grupo radical palestino Hamas, que gobierna en la Franja de Gaza, también condenó las caricaturas, alegando que sólo echan más "leña al fuego", dijo su líder Izzat Rishek.

El diario oficial de Hamas, Falestin publicó hoy una caricatura exigiendo límites a la libertad de expresión si ésta se utiliza para ofender a Mahoma. En la imagen aparece una mano con la frase "Todo menos el profeta", que frena un pincel con una cabeza satánica, sostenido por una mano en cuyo brazo se lee "libertad de expresión".

También el Parlamento de Pakistán condenó hoy la nueva edición del semanario. "Pedimos a la comunidad internacional, incluyendo la Unión Europea, que garantice que no se repitan esos sucesos", señala una resolución aprobada hoy en Islamabad.

Después los diputados se reunieron en una marcha de protesta ante el Parlamento. "¿Por qué la gente en Occidente hace algo así si sabe que el castigo según nuestra Sharia (ley islámica) es la muerte?", dijo el ministro de Ferrocarriles, Saad Rafiq.

Grupos islamistas anunciaron para el viernes marchas de protesta en Pakistán contra la publicación de las caricaturas de Mahoma. La organización suní Tehreek, que representa a unas 100.000 mezquitas de todo el país, planea manifestaciones en las principales ciudades.

"Diremos al mundo que las caricaturas hirieron los sentimientos de más de 1.000 millones de musulmanes del mundo", dijo el líder de la organización, Sarwat Ijaz Qardi. En anteriores protestas contra las caricaturas de Mahoma en Pakistán se registraron numerosos muertos.