La Municipalidad de Maipú deberá pagar un total de 90 millones de pesos a dos personas y sus familiares, quienes resultaron heridos en un accidente con fuegos artificiales que se produjo la noche de Año Nuevo del año 2001.
Así lo confirmó la Corte Suprema en un fallo unánime de la Tercera Sala del máximo tribunal, integrada por los ministros Héctor Carreño, Pedro Pierry, Sonia Araneda, Haroldo Brito y el abogado integrante Benito Mauriz.
La resolución determinó que el municipio debe pagar 40 millones de pesos a José Miguel Silva Solís de entonces 14 años, por el accidente que le provocó la pérdida de su globo ocular derecho, fractura nasal, pérdida del párpado izquierdo, quemadura facial tipo AB y diversas lesiones en sus brazos, con daños estéticos por desfiguración y profundas cicatrices.
Asimismo, Daniela Karina Reyes Cantero, quien tenía 11 años ese 1 de enero de 2001, deberá recibir 25 mil millones de pesos tras sufrir quemaduras tipo AB frontal, edemas faciales, heridas contusas en el párpado inferior derecho, quemaduras en la palma de la mano derecha y alojamiento de un cuerpo extraño en la cavidad intracraneana, cuya trayectoria comprometería ambos ojos.
En tanto, José Miguel Silva Ríos e Ivonne Ester Solís Díaz, deberán recibir una indemnización de 7 millones 500 mil pesos y 5 millones deberán ser pagados a Héctor Enrique Reyes Solís y Elizabeth del Carmen Cantero Toledo.
En una segunda instancia la Corte de Apelaciones había determinado el pago, a los jóvenes directamente afectados, de 30 millones de pesos a José Miguel Silva Solís y 25 millones de pesos a Daniela Karina Reyes Cantero.
Este accidente se produjo por la mala manipulación de fuegos de artificios y resultaron 3 personas muertas y 28 heridas de diversa consideración. Las víctimas fatales alcanzaron un acuerdo extrajudicial por el cual recibieron la suma total de 437 millones de pesos en el año 2005.