Distintas teorías sobre la muerte de Diana de Gales han aparecido desde el 31 de agosto de 1997. Hoy, cuando se cumplen 20 años desde aquel accidente automovilístico en el pilar 13 del Puente de Alma en París, te recordamos las principales investigaciones que se han llevado a cabo para dilucidar los reales motivos del fallecimiento de la mujer más querida de Reino Unido.
Exceso de velocidad. Tanto las indagatorias británicas como las francesas concluyeron que Henri Paul, el chofer del vehículo en el que iba Lady Di junto a su novio Dodi Al Fayed -hijo de un millonario empresario egipcio dueño de la cadena hotelera Ritz y del mall de lujo inglés Harrods- iba en estado de ebriedad y a exceso de velocidad, por lo cual habría perdido el control del auto cuando escapaba de un grupo de paparazzis. Según se indicó posteriormente, Paul no era conductor profesional y además se encontraba tomando antidepresivos, lo cual lo llevó a un "deterioro de la capacidad de discernimiento por el alcohol" (sostuvo el Tribunal Superior de Londres).
¿Muerte provocada? ¿Embarazo? Aunque no hay nada concluido sobre una supuesta intencionalidad detrás de la muerte de la pareja y su chofer, el padre de Dodi, Mohammed Al Fayed ha insistido en la teoría de que el accidente fue fruto de una conspiración de los servicios secretos de la Casa Real, ordenada por el príncipe Felipe de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II de Inglaterra. De acuerdo a lo relatado por el medio español El País, el empresario egipcio aseguraba que Lady Di estaba embazada de su hijo, noticia poco conveniente para la corona británica: no se podía permitir que un egipcio fuera el padrastro del aspirante al trono.
Persecución de los paparazzis. Según la justicia francesa los fotógrafos que se encontraban persiguiendo a la pareja no fueron responsables. Pero grupos que los culpan no dejan de existir. Los tribunales británicos estimaron, en tanto, que la velocidad de los automóviles en los que iban los paparazzis si influyeron, aunque no fueron la causa directa.