Cuenta Andy Murray que no tenía idea que mañana jugaría por décima vez en su carrera en los cuartos de final de Wimbledon. Alguien le dio el dato después de su victoria de ayer sobre el francés Benoit Paire.
En su habitual columna para BBC, el número uno del mundo revela el mal hábito alimenticio que tenía por allá por el 2005, año de su primera participación en el major sobre césped: "Comía pizza antes de los partidos. Perfectamente recuerdo lo mal que me alimentaba antes de enfrentar a los mejores tenistas del mundo. Claro que sabía que Wimbledon era importante, pero realmente no estaba consciente de todo la concentración que se debía tener. Era muy joven".
Murray relata que se alojaba en el sótano de una casa en el centro del barrio de Wimbledon con su madre y su hermano. Se iban caminando al All England Club la mayor parte del tiempo.
El escocés enfrentará mañana en el primer turno del Court Central a Sam Querrey, a quien define como un oponente muy duro. Murray define aquella cancha como el lugar en donde ha jugado su mejor tenis. Mal que mal, ganó 2 veces el torneo más tradicional del planeta, y el oro en los JJOO de Londres, que se disputaron precisamente ahí.