Sony, que se plantea deshacerse de su rama de telefonía móvil en el futuro, anunció este lunes en Barcelona el lanzamiento de un nuevo smartphone estanco, el Xperia M4 Aqua, y una tableta Xperia Z4, muy fina.
"El Xperia M4 Aqua completa nuestra propuesta central", declaró Olivier Terme, director de marketing de Sony Mobile France, citado en un comunicado difundido en el Congreso Mundial de la Telefonía Móvil de Barcelona en el que Sony no realizará ninguna conferencia de prensa por primera vez en mucho tiempo.
La estanquidad del aparato responde a algunas condiciones: no debe sumergirse a más de metro y medio de profundidad en agua dulce durante más de 30 minutos, y esto previo cierre de las trampillas presentes en ambos lados del aparato.
Este modelo, que también está protegido contra el polvo, está equipado con un aparato de foto de 13 millones de pixels.
Es el sucesor en la categoría de smartphones impermeables M2 Aqua, que salió el pasado otoño.
El fabricante nipón asegura que la batería del M4 Aqua tiene dos días de autonomía, lo que te permite "irte de fin de semana sin el cargador" y se vende por 335 dólares.
Técnicamente M2 Aqua posee pantalla IPS de 5 pulgadas con resolución HD 1280 x 720 píxeles, cámara frontal de 5 Mpx, cámara trasera de 13 megapíxeles, procesador Snapdragon 615, 2 GB de RAM, almacenamiento de 8 GB y conectividad LTE.
En cuanto al Xperia Z4 Tablet, Sony asegura que está dotado con una pantalla de 10 pulgadas que es la más ligera y más fina del mercado.
Esta cuenta con el poderoso procesador Snapdragon 810, el último producto del fabricante de componentes Qualcomm.
Los dos productos presentados en Barcelona funcionarán con Android Lollipop, la versión 5.0 del sistema de explotación móvil de Google.
Al diferencia de sus competidores, como HTC y Samsung, Sony no ha anunciado la salida de ningún modelo de smartphone de alta gama en esta edición 2015, aunque lo hubiera podido hacer con el futuro Xperia Z4.
En una conferencia de prensa que ofreció el 18 de febrero pasado el presidente de Sony Kaz Hirai, éste habló de una posible "estrategia de salida" de su grupo del mercado de televisores y de teléfonos portátiles, para reforzar la actividad de los sectores de los juegos de video, ocio y cámaras fotográficas.
La división de teléfonos móviles Xperia del gigante japonés registró 1.200 millones de dólares de pérdidas en el último trimestre de 2014.
