Estados Unidos y nueve naciones concertaron el viernes una alianza para combatir al grupo extremista Estado Islámico en los frentes financiero y militar a fin de destruirlo después de que lo consideraran una gran amenaza para los países de la OTAN.
Ante el control que el Estado Islámico ejerce en el este de Siria así como en el norte y oeste de Irak, el presidente Barack Obama puso de relieve que los extremistas "superan en armas y hombres" a los rebeldes sirios moderados que combaten a ese grupo y al gobierno de Bashar al Assad.
Además del compromiso de pasar a la acción de sus colegas de la OTAN, Obama exigió a los aliados árabes que rechacen el "nihilismo" que proyecta el grupo extremista.
La nueva coalición de la OTAN tendrá capacidad de emprender acciones sostenidas para repeler a los extremistas, dijo Obama.
El secretario de Estado, John Kerry, y de Defensa, Chuck Hagel, ambos de Estados Unidos, en diálogo con sus colegas en la reunión internacional, insistieron en que las naciones occidentales tengan listo un plan para cuando se reúna este mes la Asamblea General de la ONU.
"No he afrontado resistencia ni rechazo ante la noción básica de que tenemos un papel crítico que desempeñar para repeler a esta organización salvaje que está causando mucho caos en la región y daño a tantas personas, y representa una amenaza de largo plazo para el bien y la seguridad de los miembros de la OTAN", declaró Obama durante la clausura de la cumbre.
"Así pues, existe la gran convicción de que tenemos que actuar, como parte de la comunidad internacional, para debilitar y destruir finalmente al EI; esta situación es muy alentadora", agregó.
Al platear una estrategia para Irak, Obama dejó entrever una campaña militar amplia, en una manera similar a las acciones de las fuerzas estadounidenses para rechazar a Al-Qaeda a lo largo de la frontera de Pakistán con Afganistán, eliminando a los líderes, reduciéndole su territorio de influencia y atacando a sus combatientes. En esta campaña, Estados Unidos ha recurrido a persistentes ataques aéreos, generalmente con aviones teledirigidos de la CIA.
Hasta el momento, Estados Unidos ha efectuado ataques aéreos en Irak pero circunscritos principalmente a la asistencia de las fuerzas curdas y la protección de los refugiados.
Sin embargo, Obama se ha fijado el objetivo de desmantelar y destruir al Estado Islámico. Afirmó el viernes que Estados Unidos continuará la cacería de los extremistas tal como lo hizo con Al-Qaeda y al-Shabab en Somalia.
Kerry tiene previsto viajar la semana entrante al Oriente Medio con la expectativa de ampliar la coalición contra el Estado Islámico con naciones no occidentales.
Obama declaró: "Considero absolutamente crítico que tengamos a los estados árabes y específicamente a los estados de mayoría suní que rechazan el tipo del nihilismo extremista que vemos en el EIIL, y que dicen que eso no es de lo que se trata el Islam y están dispuestos a participar con nosotros activamente en la lucha".