El español Rafael Nadal, que anunció su vuelta al circuito la próxima semana en Montreal, aseguró que no cree que sea el fin de su carrera "este problema en la rodilla", ya que "en 2005 la situación" con el pie "era mucho más delicada que ahora".

Nadal, en declaraciones al diario Marca desde su residencia de Porto Cristo (Mallorca), aseguró que se equivocó "jugando en Madrid" con molestias, aunque desde "Montecarlo no estaba rindiendo como debía", dijo el jugador.

La derrota con Soderling en Roland Garros "no sé si fue la más dolorosa", pero "ha sido de las pocas veces que no he tenido el control de la situación en ningún momento", aseguró el tenista.

"Venía haciendo el mejor año de mi vida hasta que vinieron los problemas" en la rodilla, en gran parte "por querer ir a más y no saber el límite", dijo Nadal, en referencia a los "dos edemas en la inserción de la rodilla, un problema a largo plazo", según el mallorquín.

En los últimos torneos "estaba jugando con más desconfianza de movimientos, y uno va ganando porque está en una dinámica ganadora y va aguantando. Pero con el problema que tenía en la rodilla ni me podía entrenar bien, ni con la intensidad a la que estoy acostumbrado y eso poco a poco te va quitando nivel", comento Nadal.

Sobre la Copa Davis, el tenista dijo sentir su ausencia en la eliminatoria frente a Alemania del pasado julio, puesto que en su calendario "siempre entra" esta competición, y señalo que con Israel en casa no se debería perder.

Para el US Open, que comenzará dentro de un mes, Nadal no quiso marcarse objetivos, ya que su participación dependerá "de cómo vayan los torneos previos, de cómo respondan las rodillas, de la confianza", aunque no "trastocaría los planes llegar como número 3 del mundo" puesto que "el objetivo es el mismo", dijo el tenista.

"Mi gran felicidad no ha sido cuando gané como número 1, sino que fue cuando gané Wimbledon, Australia, los Juegos el año pasado", puesto que "entre ser número 1 y número 2 no me ha cambiado la vida", dijo Nadal.

"Cuando gané Wimbledon el año pasado los dos siguientes meses estaba feliz porque había conseguido uno de los sueños de mi vida", y ahora "mi objetivo es sentirme feliz jugando para poder seguir optando a ganar grandes torneos", afirmó Nadal, que por el momento dijo no sentirse capacitado para llegar a los 15 grandes títulos que ha logrado el suizo Roger Federer.