No han sido fáciles las últimas semanas para Natalia Riffo (45). Un grupo de parlamentarios de las dos mayores coaliciones políticas ha levantado cuestionamientos hacia su gestión presupuestaria, lo que se ha reflejado en ásperas discusiones en el Congreso. Se le nota dolida. "Es una discusión mezquina. Cuando uno escucha a parlamentarios que hacen críticas respecto a, por ejemplo, 'programitas', y le bajan el perfil a lo que una está haciendo, me parece una falta de respeto. La Subsecretaría tiene programas pequeños, pero súper interesantes. Aunque tengan pocos recursos, no son programitas. Escucho a dirigentes del deporte y parlamentarios que dicen eso, y creo que es una falta de respeto para esos funcionarios que están trabajando y para el gobierno. Lo último que ha hecho este ministerio es poner lo político como una traba para poder desarrollar la política deportiva. Eso no lo voy a permitir. Eso le hace mal a la política y a la gente. Yo no estoy dispuesta a discutir en esos ámbitos. Estoy discutiendo de política pública, no de favores. Pongamos al deporte por delante de eso".
En política se habla de fuego amigo. ¿Cómo toma que parlamentarios de su misma coalición critiquen su gestión?
Más que fuego amigo, me referiría a personas que son escogidas por la gente, que tienen que estar en terreno para opinar con propiedad de un tema como el deporte.
¿No le preocupa que estas situaciones provoquen que la Presidenta determine su salida?
Uno está disponible desde el día que la nombran. Preferiría no opinar, porque es una facultad propia de la Presidenta. Sí me preocupa que se vayan instalando cosas que no son verdad. Eso es lo más complejo. Ningún problema con las cosas que son ciertas y la crítica verdadera. Además, hoy las redes sociales son brutales. Pero eso no puede pasar con las dirigentas deportivas y con el parlamento. Hay que opinar con conocimiento.
A propósito de redes sociales, hace unos días apareció una foto de la subsecretaria Nicole Sáez haciendo propaganda política.
Como primera cosa, no sé si lo habrá hecho en horario de trabajo. Entiendo que no. Nosotros teníamos súper claras las restricciones sobre eso y creo que la subsecretaria, también, y las cumplió. Si yo me hiciera cargo de todas esas publicaciones en medios electrónicos que hablan de fuentes cercanas, me volvería loca. Pero creo que también hay otro componente y voy a ser más dura: creo que es un componente de género. A mí no me tratan igual como a otros ministros. He logrado que no me mijiteen, pero lo hacían al comienzo y eso es brutal. O sea, es brutal que cuando tú estás en una discusión te digan mijita. No sé si le dirán mijito a algún ministro.
¿Quiénes la trataban de mijita?
¡Los parlamentarios! Me tratan de una manera distinta y eso es complejo. Y voy a ir al tema político, porque una está en un cargo político, no técnico. Y pareciera que hacer política hoy es algo corrupto y eso es muy malo para el país. Lo vimos con la abstención y tiene que ver con instalar la política en un lugar oscuro. Obviamente uno no va apoyar la corrupción, pero la política es la clave de la gobernabilidad de un país. Y cuando una hace eso, es malo, o es como si una hubiera llegado de Marte al Ministerio.
Pero la gente se queja de que el cuoteo político prima por sobre otras cosas y dice que en ciertos cargos hay personas que no tienen mayores competencias y sin embargo toman decisiones.
Yo creo que es cierto y creo que la Presidenta ha conformado un ministerio que obviamente tiene un equilibrio político. Así se gobierna. Y cuando en algunos ámbitos se necesita apoyo técnico, para eso tiene equipos y asesores. En el caso del Comité Olímpico, hay una mesa de expertos que trabaja en cosas súper técnicas. Yo no voy a decidir si un deportista va a entrenar a Europa o qué head coach va a tener. Me pasaría de desubicada.
A usted se le criticaba por no haber estado vinculada al mundo del deporte...
Eso me ha dado una tremenda libertad, porque lo que uno observa es que el mundo del deporte está lleno de intereses: políticos, económicos, de todo tipo... Yo vengo del mundo de las políticas públicas y eso me da una libertad de tener una mirada más transparente y limpia con respecto a las decisiones que tengo que tomar y a las alianzas que establecer. Y eso es muy bueno para el deporte.
Bachelet puso plazo para que dejen su cargo aquellos ministros y subsecretarios que quieran postular al Parlamento. ¿Usted tiene aspiraciones de ese tipo?
Obviamente se acerca la fecha y una empieza a tener conversaciones, donde hay ofrecimientos. Algunos no tan claros como otros. Uno tiene que evaluar y pensar, pero estoy súper centrada en los temas de la pega.
¿Entonces está pensando en dejar su cargo?
Uno tiene una vocación pública y es importante que la pueda desarrollar donde mejor crea. Hoy estoy acá, hay luces respecto a otras cosas y habrá que evaluarlas.
¿No tiene una decisión tomada sobre su futuro?
Esas son conversaciones muy privadas y cuando llegue el momento tomaré una decisión de si sigo o no. Lo que sí, estoy abocada a mi trabajo... ¿Sabes lo que me pasa? Es que en particular en estas primeras reuniones de discusión presupuestaria, creo que deberíamos avanzar a una forma de hacer política distinta. Si nosotros no nos respetamos en un espacio como es el Parlamento y se menosprecia lo que se hace, estamos muy mal encaminados. Me siento responsable de no avalar algo así y de estar presente para que eso no ocurra.
¿Se siente discriminada por ese discurso y esa forma?
Yo creo que las mujeres en política tenemos espacio reducido y somos discriminadas. A uno le preguntan cómo lo hace para cuidar a los niños. ¿Tú crees que a algún ministro le preguntan con quién deja a los niños? No, no lo hacen.
¿Le han hecho esa pregunta en el Parlamento?
No, no digo que en la Comisión de Deportes, pero sí en general me la hacen. Esa pregunta no se la hacen a un hombre. Yo creo que nosotros en política, como mujeres, tenemos un doble desafío y tenemos que hacer la pega bien. Pero las mujeres tenemos la misma capacidad y nos tienen que respetar como tales.
La noto algo enojada.
Noooo, para nada. Se lo he dicho directamente a la persona con quien he tenido estos problemas. Yo no soy de andar poniendo caritas. No me nace. Yo siempre he creído en la política de los acuerdos y del consenso, pero siento que en dos años y medio hemos hecho cosas tan potentes, y de verdad me violenta. A lo mejor no es enojo, pero defenderé esta pega que se ha hecho, independientemente de que me quede o no. A veces la crítica liviana o fácil me violenta por la gente que trabaja conmigo, porque yo tengo cuero de chancho.
¿La ejecución presupuestaria es el talón de Aquiles del Ministerio del Deporte?
Yo creo que no. El presupuesto creció en un 43% desde que llegamos y en un 38% en el alto rendimiento. La problemática la hemos tenido sólo en inversiones. Todo lo demás ha tenido una ejecución excelente y ha aumentado en término de cobertura y presupuesto. Centrarlo en que es un talón de Aquiles, porque hemos tenido problemas en una de las áreas, no es justo.