La tendencia es clara en la postemporada de la NBA: los equipos dueños de casa han hecho valer tal condición y apenas una serie se escapa a la norma, aquella en que Chicago Bulls se impuso 2-0 como visitante en sus primeros duelos ante Boston Celtics, que parece muy afectado por la situación emocional de su estrella Isaiah Thomas, quien hace unos días lamentó la muerte de su hermana en un accidente automovilístico.
Este noche, en Texas, los Houston Rockers se impusieron ante Oklahoma Thunder por 115-111, que ofreció oposición sobre todo por la tremenda actuación del escolta Russell Westbrook, quien anotó 51 puntos, cogió 10 rebotes, realizó 13 asistencia y logró cuatro robos; una proeza personal, pero que no le alcanzó para que su equipo se llevara la victoria.
En el Distrito de Columbia, en tanto, los Washington Wizards se impusieron por 109-101 a Atlata Hawks y quedaron en inmejorable posición para adjudicarse una de las semifinales de la Conferencia Este de la NBA. El jugador decisivo del partido fue el escolta Bradley Beal, quien anotó 31 puntos, 16 de ellos durante el último cuarto. En números totales lo superó su compañero John Wall (32).
De esta manera, cuatro de las ocho llaves están 2-0 para quienes iniciaron los playoffs en casa y anoche los Golden State Warriors recibían nuevamente a Portland Trail Blazers con una ventaja de 1-0, conseguida con absoluta holgura en el debut. Así, todo parecía encaminado para fueran cinco los choques que fuera favorable para los anfitriones: En equilibrio de 1-1, en cambio, se cerraron los enfrentamientos de Toronto Raptors vs. Milwaukee Bucks y Los Angeles Clippers vs. Utah Jazz.
