Los rivales se enfrentan de cara al espectador: el prefecto de policía Oscar Peluchonneau mira con convicción y severidad, mientras  una sonrisa pícara cruza el rostro de Pablo Neruda. Así de simple es el afiche promocional de Neruda, el nuevo filme dirigido por Pablo Larraín y con guión del dramaturgo Guillermo Calderón, que llega a salas locales el próximo 11 de agosto.

Interpretado por Luis Gnecco, el vate está en plan de huida. Corre 1948 y el presidente Gabriel González Videla emprende una persecusión política en contra del Partido Comunista, lo que pone al autor de Canto General en el blanco principal. A cargo está Peluchonneau (Gael García Bernal), un policía que ha leído poco y que empieza a desesperarse por los juegos del escritor: Neruda se disfraza, va de fiesta en fiesta y de país en país, junto a su esposa la artista argentina Delia del Carril (Mercedes Morán), sin nunca deja de disfrutar el papel de perseguido.

Filmada en Buenos Aires, Santiago, Valparaíso, en la Región de la Araucanía y París, el filme se estrenó en mayo pasado, en el Festival de Cine de Cannes y cautivó por su inusual mirada al Premio Nobel de Literatura. Neruda muestra su faceta más ególatra y hedonista y aprovecha la persecución en su contra para extender aún más su fama, convirtiéndose en un símbolo de libertad y una leyenda literaria. Mientras Peluchonneau no parece estar a la altura de las circunstancias.