Que Netflix no haga públicas sus cifras de audiencia no significa que no estudie constantemente el comportamiento de su público o que no analice formas de aprovecharlo. "Nuestro catálogo está creciendo y nuestros usuarios también, entonces tenemos que encontrar formas de que a ellos se les haga fácil encontrar el contenido", explica a La Tercera Todd Yellin, vicepresidente de producto de Netflix.
Por eso, el servicio ha ido afinando lo que definen como parte fundamental de su estrategia: su sistema de recomendaciones. Según el más reciente estudio de la compañía, un 80% de las series que la audiencia descubre en el catálogo de la plataforma, son gracias a recomendaciones de esta misma. Algo que, según explica Yellin, no es azar: "No decidimos poner arbitrariamente una recomendación. La plataforma lo hace en base a los gustos de la audiencia".
La recomendación no siempre es obvia. Para ilustrar el estudio -que Netflix realizó midiendo el comportamiento de los usuarios por dos años en más de 40 países- el servicio utiliza sus series originales basadas en superhéroes de Marvel: Daredevil, Jessica Jones, Luke Cage y Iron Fist -más el crossover The Defenders-. Y si bien el interés por personajes de cómics es el principal criterio por el cual el público llega a esas historias, lo que destacan una de cada ocho personas que las consume es que nunca antes había visto una producción centrada en superhéroes.
¿Cómo llegaron allí? A través de otros intereses que el algoritmo de la plataforma detectó. "Lo que Netflix hace es tomar a nuestros millones de suscriptores y dividirlos en lo que llamamos 'grupos de interés'. Pero las series no apelan a un sólo grupo, sino a varios. Por ejemplo, Ozark, probablemente salga como recomendación a quienes han visto series sobre narcotráfico, como Narcos, pero también con antihéroes, como House of cards, e incluso historias financieras, como la película La gran apuesta", dice Yellin.
Así, según el ejecutivo, las series de Marvel han encontrado un público atípico: Daredevil es vista por quienes han seguido otras series de antihéroes, como Bloodline y Breaking bad, mientras que Luke Cage interesa a quienes han visto historias de problemas de justicia, como el documental Amanda Knox. "Incluso a quienes les gusta Unbreakable Kimmy Schmidt, han terminado viendo Jessica Jones. Son historias distintas, pero ambas son mujeres con sentido del humor y muy fuertes", dice el ejecutivo, agregando: "Incluso hemos descubierto cosas extrañas: por alguna razón, la gente que ve Black Mirror se interesa mucho después en historias sobre los vicios de la industria alimenticia".
Yellin reitera que las recomendaciones siguen un patrón de lógica. "Lo que importa es cómo le presentas una historia a la audiencia. Cuando salió Jessica Jones, mi mujer detestaba las historias de cómics. Pero primero le dije que era una historia de misterio, con una mujer fuerte y aclamada por la crítica. Cuando ya estaba involucrada, se dio cuenta que era sobre una superheroína. Eso hace Netflix", afirma.