Dirigentes de la federación de gimnasia expulsada hace meses del Comité Olímpico de Chile enviaron hace unos días a la Organización Deportiva Panamericana (Odepa) y a sus miembros una carta, publicada ayer en exclusiva por La Tercera, en la que acusaban irregularidades en el proceso de integración de la nueva federación presidida por el gimnasta Tomás González, por sobre la de María Inés Icaza, como parte del COCh.

El texto señala que esta última tiene mayor representatividad. La carta la firma el ex presidente Eduardo Bahamonde, que apoyaba a la lista de Icaza.

El presidente del COCh, Neven Ilic, quien apoyaba también a la federación de González, supo de esta carta. "Lo de la elección de la gimnasia es un tema cerrado. Tal como responde ahí mismo en el diario Julio César Maglione, presidente de la Odepa, ellos no tienen interés", señala Ilic.

Pero la carta de Bahamonde a los comités olímpicos genera una arista más: acusa directamente a Ilic de intervenir las elecciones y critica duramente su gestión. ¿Esto podría pasarle la cuenta al chileno la próxima semana, cuando esos mismos dirigentes elijan al nuevo presidente de la Odepa? Ilic cree que no. "No me interesa lo que haga o no el señor Bahamonde, porque hemos hecho un procedimiento más profundo que ese, visitamos a los comités y les explicamos nuestros puntos. No creo que la carta influya en la elección", comenta Ilic.

De paso, se refirió al caso de dopaje del ciclista Edison Bravo: "La culpa es de los cabros que hacen cosas reñidas con el espíritu del deporte y también de nosotros, que no los educamos".