El domingo fue el día más importante en la breve carrera de Nicolás Jarry, pues consiguió su primer título profesional, el Futuro 13 de Estados Unidos, en Orange Park.

"Esta temporada va muy buena por ahora. Físicamente, estoy muy bien, por suerte no he tenido ningún problema y en cuanto al tenis, va súper bien. El año pasado no pude hacer ninguna semifinal y este año ya llevo una semi, dos finales y un título", afirma.

Pese a su buen rendimiento que lo hará trepar hasta el puesto 540 del mundo la próxima semana, el jugador de 18 años, no se pone mayores objetivos. "La verdad es que no tengo metas, es mi primer año como profesional y hay que tomarlo tranquilo. Lo único de lo que me preocupo es de seguir jugando mejor al tenis", señala.

En ese contexto, tampoco piensa en la clasificación. "Sólo quiero seguir mejorando en todo y lo del ranking se va dando de a poco", dice.

Eso sí, está consciente de los aspectos que debe potenciar para progresar. "Me falta mejorar la parte mental; seguir concentrado sin importar el resultado del partido y el resultado de cada pelota que uno le pega, y no demostrar tanto mi estado anímico al otro".

Por último, destaca el momento que vive la actividad: "El tenis chileno por historia nunca ha sido malo, ahora hay una nueva generación y estoy muy contento, porque nos esta yendo a todos muy bien".