El presidente de la Cámara Baja, Nicolás Monckeberg (RN), se refirió esta mañana a las tratativas de diálogo que se espera que surjan entre el Gobierno y la oposición. Recordemos que el diputado se ofreció como mediador entre el gobierno y la oposición, tras la renuncia del titular del Senado, Camilo Escalona, a propiciar este diálogo.

"No pueden haber condicionamientos ni vetos para iniciar instancias de este tipo entre parlamentarios", dijo Monckeberg. Esto debido a que sectores de la oposición han dejado manifiesta la opción de concretar acuerdos con el Ejecutivo sólo si está sobre la mesa el tema de la reforma al sistema electoral binominal.

"Ningún diálogo debe estar condicionado ni sujeto a ciertos temas en particular. Evidentemente que respecto al sistema binominal hay distintas posturas, pero ninguna de ellas puede ser tan poderosa como para condicionar la existencia de un diálogo en tantas otras materias", aseveró el legislador.

Asimismo, el parlamentario manifestó la necesidad "urgente" de que los políticos del país "nos pongamos de acuerdo en los temas que son realmente relevantes y que le pueden cambiar la vida a muchos chilenos".

Por lo mismo, le parece un error condicionar instancias de acuerdo, "porque debemos estar dispuestos a discutir todos los temas incluido el sistema electoral, eso no significa que necesariamente logremos un acuerdo ni que unos le impongan a otros sus puntos de vista, pero negarse a priori a un tema relevante como es el sistema político o sistema electoral en nuestro país, a mi juicio no es correcto".

Refiriéndose a su postura personal frente a un cambio en el sistema electoral, Monckeberg fue claro en decir que "no creo que nuestro sistema electoral sea perfecto ni mucho menos inmutable y, por lo tanto, no veo inconveniente alguno que junto con otros temas, sea éste uno de los temas que discutamos y exploremos las posibilidades de acuerdo".

"Personalmente creo que el funcionamiento de nuestro sistema político incluido el sistema electoral sí debe ser objeto de un profundo análisis y no descartar eventuales cambios que lo perfeccionen", agregó.

Además sostuvo que no le parece una 'buena receta' el que "algunos condicionen su disposición al diálogo al hecho de que esté un tema o no esté otro tema. El diálogo tiene que ser, de alguna forma, generoso por ambos sectores". 

"La disposición a lograr acuerdos no es una opción o una concesión de un sector político al otro, es una obligación de todos los parlamentarios porque la democracia no se construye con que un sector destruya las ideas del otro, sino que al revés, se construyen en que ambos se sienten a la mesa a intentar llegar a un acuerdo, y en esa disposición no pueden haber ni condicionamientos ni vetos", finalizó.