Esta mañana, Cristóbal Ugarte, el nieto de Nicanor Parra, recibe de las manos del príncipe Felipe de Asturias el premio Cervantes.

La ceremonia tiene lugar en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá, marcada por la ausencia del antipoeta y los reyes de España, quienes son representados por los príncipes de Asturias.

Al aceptar el reconocimiento, Ugarte leyó a los presentes, "mi abuelo me ha encargado que pida prórroga de al menos un años, del 23 de abril de 2012 al 23 de abril de 2013, para así poder perigueñar un discurso medianamente plausible". "Don Quijote no cabe en un fin de semana", agregó.

A continuación, Ugarte leyó poemas y antipoemas de su abuelo, como Soliloquio del Individuo y El Quijote de Parra, en cuanto "por de pronto, fueron estos los que merecieron tal atención del jurado para considerarlo acreedor al llamado Nobel de las Letras Hispanas".

"Los premios son como las dulcineas del toboso", continuó, "mientras más pensamos en ellas, más lejanas". "Los premios", leyó el nieto de Nicanor Parra, "son para los espíritus libres y para los amigos del jurado". 

Ugarte finalizó diciendo: "Mi abuelo se formula la siguiente pregunta: ¿Se considera usted acreedor del premio Cervantes? Claro que sí ¿por qué? por un libro que estoy por escribir".

Felipe de Asturias, en tanto, hizo una reseña a la obra de Parra, y comentó, en relación al galardón: "Con el brío que le dan casi 100 años bien vividos, le bailará una cueca, aquella, por ejemplo, que grabó su hermana Violeta". El heredero al trono español añadió que "Cervantes sonreirá y dirá, 'sí, raro inventor, colega, aquí te esperábamos, bienvenido'". 

En la ceremonia, Chile estuvo representado, además, por el ministro de Cultura Luciano Cruz-Coke, el ministro de Relaciones Exteriores, Alfredo Moreno, y por la hija de Parra, Colombina.