Al menos siete personas murieron tras los atentados cometidos hoy en Abuja, capital de Nigeria, durante el desfile militar por el aniversario de la independencia, informaron fuentes policiales.

Según relató un fotógrafo de prensa que cubría la ceremonia, las explosiones se produjeron a 200 metros de la Plaza de las Águilas, donde está la tribuna en la que se encuentran las autoridades que asisten al festejo.

Además del Presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, participaban en los actos los gobernantes de otros 14 países, la mayoría africanos.

Pese a las explosiones, el acto oficial prosiguió sin interrupciones, transmitido en directo por las emisoras de televisión locales.

Una de las explosiones la produjo un coche bomba situado junto al Ministerio de Justicia, que ardió e incendió otros vehículos estacionados en las inmediaciones.

"Los bomberos consiguieron apagar el fuego, mientras los agentes de seguridad acordonaban la zona", agregó el testigo.

"Se teme que pueda haber muchas víctimas", reiteró el fotógrafo, quien indicó que gran número de ambulancias han empezado a evacuar heridos hacia los hospitales de la ciudad.

Otro periodista, que pidió el anonimato y cuya oficina se encuentra cerca del Hospital Nacional de Abuya, dijo que "un gran número de ambulancias, con las sirenas encendidas, han llegado al hospital".

Previamente, el Movimiento para la Emancipación del Delta del Níger (MEND), el principal grupo guerrillero de Nigeria, afirmó que había colocado explosivos en ese lugar y dio un plazo de media hora para su evacuación.

"Varios artefactos explosivos fueron colocados adecuadamente en el lugar y sus alrededores por nuestros miembros, que trabajan dentro de los servicios de seguridad", decía la nota del MEND.

Para el MEND, "no merece la pena que se celebren cincuenta años de fracasos. Durante estos 50 años, el pueblo del Delta del Níger ha visto como su tierra y sus recursos eran robados", de lo que acusa a los regímenes militares que han gobernado el país muchos años.

En 2009, miles de miembros de las guerrillas y grupos armados del sur de Nigeria se acogieron a la amnistía ofrecida por el Gobierno de Abuya, entre ellos muchos miembros del MEND, pero la organización como tal decidió seguir la lucha armada.

El MEND y otros grupos se levantaron en armas hace cuatro años para reclamar mayores inversiones para el desarrollo de la zona petrolera del sur de Nigeria, la que más aporta a la riqueza del país y donde la mayoría de los habitantes siguen en la miseria.

Nigeria, el país más populoso de África con 150 millones de habitantes, celebra hoy el cincuentenario de su independencia sin haber alcanzado la cohesión y amenazado por la violencia, la desigualdad y las tensiones étnicas, sociales y religiosas.