Pasadas las 21.00 horas de ayer, un menor de dos años fue arrastrado por un caimán que se encontraba al interior de la Laguna Seven Seas ubicada en el Disney's Grand Floridian Resort y Spa.

Desde ese momento se desplegó un gran operativo de búsqueda para dar con el niño, sin embargo hoy las dudas fueron aclaradas, ya que un policía de Florida aseguró que el menor murió.

Según publicó la agencia Reuters, el efectivo policial indicó que "no day dudas" de que el niño está muerto. 

Como parte del operativo, los funcionarios del parque capturaron y sacrificaron a cuatro de estos reptiles para examinarlos en busca de los restos del niño, pero no se hallaron pruebas.

El caimán atrapó al niño, que estaba jugando al borde del agua mientras su familia, que había viajado desde Nebraska para pasar sus vacaciones, se encontraba descansando en los alrededores de la laguna, dijo el portavoz policial, Jeff Williamson, en una conferencia de prensa.