El día de ayer la junta médica convocada para la investigación del caso de Alberto Nisman, concluyó que no habría pruebas para asegurar que la muerte del fiscal fue un homicidio, según informó La Nación, quienes tuvieron acceso al documento.

La fiscal a cargo, Viviana Fein, preguntó a la junta si existía "certeza pericial", para sostener que a Nisman lo mataron, quienes sostuvieron que aún no pueden descartar todas las hipótesis y que no les corresponde hacer calificaciones legales del caso. 13 de los 15 miembros del comité médico, firmaron el informe final de 203 hojas que ya está en el poder de Fein.

Las respuestas de ambos informes contienen diferencias importantes, la querella afirma que la muerte fue 36 horas antes del inicio del inicio de la autopsia, mientras que los demás aseguran que no puden haber sido más de 24 horas.

La entrega de estas conclusiones no estuvo exenta de controversias, pues los peritos designados por la familia del fiscal fallecido, Osvaldo Raffo y Julio Ravioli, abandonaron la junta antes de la redacción final del informe y entregaron el viernes pasado sus propias conclusiones, lo que generó el rechazo del resto de los miembros, quienes aseguraron que el trabajo no estaba terminado.

Los médicos criticaron esta acción cuestionando que no los hubieran dejado conocer sus conclusiones, afirmaron además que en varias oportunidades del debate habían omitido los fundamentos de sus opiniones.