Durante el último Superclásico, disputado el 2 de octubre último en el estadio Monumental, una de las situaciones que llamó la atención fue el uso masivo de fuegos artificiales en las graderías y otros puntos del recinto.
La situación no pasó inadvertida para las autoridades de la ANFP, que el 19 de octubre decidió presentar una acusación contra Blanco y Negro debido a la supuesta violación de los reglamentos relacionados con orden y seguridad durante el campeonato. Dicha presentación, no obstante, fue rechazada seis días despúes por la Primera Sala del Tribunal de Disciplina, fallo que el lunes recién pasado fue ratificado por la Segunda Sala del organismo, encargada de revisar las apelaciones a los dictámenes.
La resolución de la instancia de apelación fue tomada por la unanimidad de los integrantes de la sala. Y se basó en el hecho de que la denuncia fue interpuesta fuera del plazo establecido por la bases del Campeonato Nacional, que es de siete días hábiles desde el momento en que ocurre la infracción. En este caso, la Asociación debería haber acudido a la corte el martes 11 de octubre como fecha última y no el miércoles 19 de octubre, como efectivamente sucedió.