Sami Khedira, campeón con Alemania en el Mundial de fútbol de Brasil, fue recibido por cerca de mil hinchas en su ciudad natal, donde las autoridades bautizaron con su nombre el estadio del equipo local. El volante del Real Madrid firmó también el libro de oro de Fellbach-Oeffingen, la ciudad donde creció en el sur de Alemania, y participó luego en una fiesta de celebración por la cuarta Copa del Mundo ganada por los germanos.

"Estoy orgulloso y agradecido de ser alemán. Y estoy orgulloso de ser de Oeffingen", dijo el homenajeado, hijo de un tunecino y una alemana. A partir de ahora, la arena del club local se llamará "Estadio Sami Khedira".

El jugador de 27 años no es el único de los campeones del mundo en inspirar un cambio de nombre. También Schönau, ciudad natal de Joachim Löw, elegirá si da el nombre del técnico de la selección a una calle o a un estadio.