Algunos de los más reconocidos, emblemáticos y grandes autores de nuestro siglo jamás recibieron el galardón más prestigioso de la literatura. Jorge Luis Borges, por ejemplo, no lo recibió y a 30 años de su muerte, todavía se especulan las razones de porqué se lo negaron. Algunos dicen que fue por apoyar la dictadura de Pinochet, otros, que fue por criticar a un miembro del comité sueco. Como él, Franz Kafka, Marcel Proust, Graham Greene, Federico García Lorca, James Joyce y muchos otros grandes, tampoco lo recibieron nunca. Otros, como Jean Paul Sartre, lo rechazaron y en una ocasión excepcional la categoría se declaró desierta (1935).
Mucho secretismo rodea la elección del Premio Nobel de Literatura. Una de sus reglas más estrictas es que los finalistas de cada año no pueden conocerse hasta 50 años después, para que la presión mediática no influya en la decisión. Es por esto que su elección siempre genera muchas expectativas, y este año se suma además otro factor: que por primera vez será el último de los galardones en entregarse.
Ya se conocieron el Premio Nobel de Medicina, el de Física y el de Química. Más polémico fue el Premio Nobel de la Paz para el presidente de Colombia Juan Manuel Santos, por su papel para poner fin a más de 50 años de conflicto con la guerrilla de las FARC, y por último se dio a conocer el Premio Nobel de Economía.
Brilla por su ausencia el Nobel de Literatura, que se esperaba fuese entregado el jueves 6 de octubre. Si bien los responsables declaran que el retraso fue por una simple cuestión de logística, los críticos y conocedores del mundo literario creen que es una señal de falta de acuerdo para ponerle nombre al más prestigioso premio literario. Sea cuál sea la razón, la incógnita pronto llegará a su fin, pues mañana a las 11.00 am en Estocolmo (16.00 pm hora chilena) se conocerá el fallo de la Academia Sueca.
La espera ha sido propicia para las especulaciones; entre las apuestas del emblemático sitio Ladbrokes quien encabeza la lista es el keniano Ngugi Wa Thiong'o (n. 1938), el novelista publicó su primer trabajo Weep not Child (No llores, niño) a los 60 años. Las temáticas de sus libros suelen estar asociadas a la niñez y a la crítica social, principalmente a su natal Kenia. Dentro de sus reconocimientos, el ensayista ha recibido un premio Nonino en 2001, un Premio del Círculo de Críticos Nacional del Libro en 2012 y dos años después un premio Nicolás Guillén por su trayectoria. Entre sus obras destacan Pétalos de Sangre (1977) y El mago de los cuervos (2006).
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El keniano Ngugi Wa Thiong'o lidera las apuestas.[/caption]
Le sigue el autor de obras como Tokio blues (1987), Kafka en la orilla (2002) y 1Q84 (2011). El japonés Haruki Murakami (n. 1979) suena como favorito hace varios años para llevarse el Nobel, es uno de los grandes exponentes de la literatura posmoderna y uno de los pocos japoneses que han dado el salto a autor con grandes ventas en todo el mundo. Durante su carrera de más de 30 años ha recibido numerosos premios como el el Premio Franz Kafka 2006, el Premio internacional Cataluña en 2011 y el Premio Hans Christian Andersen (2016), entre otros.
La prosa es el género que más veces ha sido reconocido por la Academia Sueca, pero la poesía también ha sido premiada (como fue en el caso de Gabriela Mistral y de Pablo Neruda). Como representante de los poetas se alza el sirio Ali Ahmad Said Esbe (n. 1930) , más conocido como Adonis. Es considerado el máximo exponente de la poesía árabe contemporánea y ha publicado más de 20 libros. Su obra se caracteriza por un fuerte tono social y político, y entre sus premios ostenta la Medalla Picasso de la UNESCO (1984), el Premio de poesía Nonino 1999 y el Premio Goethe 2011, entre otros.
El estadounidense Philip Roth (n. 1933) también resuena en los pronósticos. A lo largo de sus más de 50 años de trayectoria, ha retratado la vida de los judíos en Estados Unidos. Algunos de sus títulos más destacados son Goodbye, Columbus (1959) y Pastoral americana (1997). Ha ganado dos premios del Círculo de Críticos Nacional del Libro, un Premio Pultizer en 1998 y un Premio Príncipe de Asturias de las Letras (2012).
Si bien la Academia Sueca siempre insiste en que no premia países, sino autores, se especula que los estadounidenses tienen buenas posibilidades de llevarse el Nobel de Literatura esta vez, pues no lo ganan desde 1993 con Toni Morrison. En este sentido, Joyce Carol Oates (n. 1938) podría sorprender. La neoyorkina ha sido cinco veces finalista del Pulitzer de Ficción y podría convertirse en la mujer número 15 en adjudicarse el Nobel de Literatura después de que la bielorrusa Svetlana Aleksiévich lo ganara el año pasado. Don DeLillo (n. 1936) es otro autor estadounidense que se sitúa entre los favoritos.
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La periodista bielorrusa Svetlana Aleksiévich ganó el Nobel de Literatura el año pasado.[/caption]
El argentino César Aira (n. 1939) aparece entre las apuestas como el autor hispanoamericano mejor posicionado. La obra del autor de novelas como Embalse (1987), Cumpleaños (2000) y Parménides (2006), podría ser el primer argentino en ganar el Nobel de Literatura ya que se sitúa por delante de los candidatos españoles Javier Marías, Eduardo Mendoza y Enrique Vila-Matas.
Además del prestigio y el reconocimiento mundial de su obra, el ganador del Premio Nobel de Literatura recibe una considerable suma de dinero. Desde el año 2012 hasta ahora, la suma que reciben los ganadores se ha mantenido constante en 8 millones de coronas suecas, lo que corresponde a más de $600 millones de pesos chilenos.