La alta representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, advirtió hoy contra una nueva escalada de la violencia y mostró su "preocupación" por el refuerzo de la presencia militar en las zonas separatistas de Ucrania y los bombardeos de la pasada noche en Donetsk.
"Los últimos informes de la misión especial de control de la OSCE en Ucrania hablan de convoyes en áreas separatistas cargadas de armas pesadas, tanques y tropas que representan motivo de gran preocupación", señaló la jefa de la diplomacia europea en un comunicado remitido por su oficina en Bruselas.
"A esto, hay que sumar las detonaciones llevadas a cabo la pasada noche en Donestk que han sido reportadas", se lamentó igualmente.
Para Mogherini, es "imperativo" que se ponga fin a esta nueva escalada de hostilidades, por lo que llama a todas las partes a "mostrarse pacíficas y atenerse a los memorándum y protocolos firmados" con el fin de "encontrar una solución pacífica y sostenible basada en el respeto a la independencia, soberanía e integridad territorial de Ucrania".
Más allá, hizo un llamamiento a la Federación Rusa a asumir la parte que le toca de responsabilidad "incluida la prevención de cualquier nuevo movimiento militar, así como la salida de tropas, armamento o cualquier otra equipación de territorio ucraniano".
La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) se dijo preocupada tras la llegada a las regiones rebeldes de una decena de tanques y una columna de 400 vehículos cargados con hombres y piezas de artillería.
"Vienen desde Rusia", acusan por su parte los ucranianos.
Donetsk volvió a quedar bajo las bombas, con un intenso fuego de artillería que se reanudó en el curso de las últimas 48 horas.
Los bombardeos volvieron a comenzar tras las "elecciones" convocadas en Donetsk y Lugansk el pasado 2 de noviembre, una votación considerada "ilegal" para Occidente y que en cambio Moscú considera "válida" a todos los efectos.
Según algunas fuentes, un disparo de artillería supuestamente cayó a poca distancia de la oficina de Alexander Zakharchenko, el dirigente de Donetsk elegido el domingo, quien resultó ileso.
Hace cuatro días algunos proyectiles cayeron sobre una escuela, causando la muerte de dos escolares y heridas a otros cuatro.
Los combates, aunque de menor intensidad que en el pasado, se reanudaron también en la zona del aeropuerto, escenario de la auténtica batalla entre las fuerzas rivales que intentan conquistarlo desde junio.
Los testigos hablan de continuos intercambios de disparos de una parte y otra.