"Cambio de gabinete aquí no ha existido", aseguró ayer el senador de la DC Jorge Pizarro, expresando el sentir generalizado que provocó el cambio de ministros que efectuó ayer la Presidenta Michelle Bachelet. El hecho de que la mandataria se limitara a reemplazar en sus cargos a quienes abandonarían el gabinete para competir en la próxima elección parlamentaria no sorprendió a nadie, pero tampoco logró aplacar los ánimos en el oficialismo.
"Sólo cambio de piezas obligado por los que decidieron intentar ir al Parlamento. No sale nadie producto de evaluación de su desempeño. Frustrante", comentó el diputado ex PPD Pepe Auth a través de su cuenta de Twitter.
La demanda de los partidos de la Nueva Mayoría era por hacer un ajuste mayor en el elenco de ministros políticos de La Moneda, y en particular, una mala evaluación sostenida al trabajo de los ministros Nicolás Eyzaguirre (Segpres) y Mario Fernández (Interior). Esto con excepción de lo que ocurrió en la Segegob -donde Marcelo Díaz fue reemplazado por Paula Narváez-, no sucedió.
El presidente del Partido Radical, Ernesto Velasco, admitió que él "hubiese esperado un cambio de más envergadura y profundidad, que oxigenara y le diera un segundo aire al gabinete".
De manera similar, el jefe de bancada de la DC, Fuad Chahín, sostuvo ayer que echó de menos que el cambio del comité político "tuviese más tonelaje político y no menos", y que "pierde el poder político en vez de ganar, y uno hubiese esperado que hubiera algún nombre que ayudara a poder mejorar la coordinación política y el liderazgo".
A juicio del presidente del PPD, Gonzalo Navarrete, más allá de si gustó o no el ajuste efectuado por Bachelet -pues "en política no son temas de gustos, sino que hay que asumir la realidad y enfrentarla"-, lo relevante es que la mandataria ya decidió cuál será el equipo político que la acompañará hasta el término del gobierno.
"Terminamos con la incertidumbre en el sentido de que se despejó el reajuste, el presupuesto y el cambio de gabiente y, por lo tanto, lo que nos queda ahora es enfrentar una agenda legislativa acordada; las modificaciones de gestión que están pendientes, y retomar las relaciones al interior de la Nueva Mayoría y con el gobierno", aseguró Navarrete.
El mismo tono empleó para evaluar el cambio el senador DC Ignacio Walker: "Este es el equipo para la recta final y punto. Ahora a a trabajar teniendo como único norte el interés de Chile", señaló.
Un discurso similar tuvo la presidenta de la DC, Carolina Goic, quien señaló que a partir de ahora lo que corresponde es poner "todo nuestro énfasis a partir del día lunes en el trabajo de coordinación entre el Ejecutivo, el parlamento y los partidos políticos en función a las prioridades de la gente, con una relación que nos permita acotar agenda y trabajar en aquellos temas que nos unen".
Mientras, el jefe de la bancada socialista, Juan Luis Castro, agregó que "las torpezas políticas deben ser aprendidas y por eso esperamos que los que siguen en el comité político hayan tomado nota de los problemas que han surgido este año (...) se necesita prolijidad, mayor diálogo y una estrategia política clara". Por su parte, el secretario general del MAS, Fernando Zamorano, aseguró que "si a la presidenta le parece suficiente, nosotros respaldamos sus decisiones". Con todo, en la DC felicitaron el nombramiento de Alejandra Krauss -militante de sus filas y cercana a los sectores más "duros" de la colectividad-, en reemplazo de Ximena Rincón, en la cartera de Trabajo.