"En la campaña se dijo que nosotros lo vamos a evaluar, y eso es lo que se va a hacer en su respectivo momento". Con esas palabras, el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, abrió ayer la puerta a una revisión por parte del gobierno de la permanencia del penal Punta Peuco, donde están recluidos uniformados en retiro que cumplen condena por violaciones a los derechos humanos.
El debate se abrió el martes, luego de que la Cámara de Diputados aprobara -por 53 votos a favor, 20 en contra y dos abstenciones- un proyecto de acuerdo solicitando a la Presidenta Michelle Bachelet que instruya al ministro de Justicia, José Antonio Gómez, para que realice "las gestiones pertinentes" para proceder al cierre de dicho centro de detención.
En octubre de 2013, poco después de que el ex Presidente Sebastián Piñera decretara el cierre del penal Cordillera -en el marco de la conmemoración de los 40 años del Golpe Militar-, la entonces candidata Bachelet fue consultada respecto de la posible clausura de Punta Peuco durante su segundo mandato. "Voy a evaluar cuáles son las condiciones políticas, de Gendarmería y carcelarias para tomar una decisión al respecto", señaló, agregando que siempre ha estado "en contra de cárceles de privilegio".
Según altas fuentes de La Moneda, el ministro Gómez se encuentra trabajando desde hace tiempo en una revisión del tema. Ayer, consultado por La Tercera, el titular de Justicia dijo que "el régimen de Punta Peuco es penitenciario, es un cárcel, se cumplen los propósitos". Aunque aseguró que el posible término del penal es un tema "que no lo hemos discutido ni está en la definición", agregó que "siempre en materia de funcionamiento penitenciario estamos haciendo análisis. Por ejemplo, creamos el penal de los primerizos en Colina, estamos viendo distribuciones en el caso de las mujeres, estamos viendo nuevas fórmulas. Es un proceso permanente".
Tras la aprobación del proyecto en la Cámara, que fue promovido por 10 parlamentarios de la Nueva Mayoría e independientes liderados por el PPD Felipe Letelier, el oficialismo aumentó la presión para el cierre de Punta Peuco.
"No creo que haya razón alguna para tener cárceles con privilegios. Resulta odioso que haya una discriminación en que hay privilegios exagerados para mi gusto. Cuando se cerró el penal Cordillera, señalamos que las razones que se aducían eran razones de salud y de acceso a condiciones de salud. La 'Peni' (Penitenciaría) está al lado del hospital penal. En qué mejor lugar podrían estar que ahí", dijo el presidente del PS, Osvaldo Andrade.
El presidente de la Cámara, Aldo Cornejo, planteó que "el precedente más inmediato es la decisión que tomó el ex Presidente Piñera respecto del penal Cordillera, y tanto los autores del proyecto de acuerdo como quienes votamos a favor consideramos que hoy día están dadas las condiciones para que no haya una discriminación tan brutal en el tratamiento que se les da a las personas que cumplen condena por delitos comunes". El parlamentario DC añadió que "no veo ninguna razón para mantener Punta Peuco".
Por su parte, el senador DC Patricio Walker respaldó el proyecto de los diputados, aduciendo que "todo lo que signifique eliminar privilegios y respetar el principio de igualdad ante la ley, yo personalmente lo apoyo", y su compañero de bancada Roberto León aseguró que "ojalá que la Presidenta Bachelet siga en la línea de lo que el ex Presidente Piñera hizo, que cerró el penal Cordillera, y ahora que cierren el penal Punta Peuco".
