Para las cinco de la tarde de hoy, la jerarquía de la Nueva Mayoría -presidentes de partido, jefes de bancada y los presidentes de ambas Cámaras- llegarán hasta La Moneda para analizar junto al comité político la agenda de lo que resta del año legislativo, además de trazar las líneas del cronograma que sigue el 2015.
En el cónclave convocado para ordenar al oficialismo, un tema inevitable serán las definiciones del Ejecutivo sobre la forma y la fecha en que intentarán llevar adelante una de las tres grandes reformas prometidas por Bachelet: una nueva Constitución.
Los partidos del bloque miran con atención los pasos que hasta ahora ha dado La Moneda en cuanto al cambio de la Carta Fundamental. Esto, pues el gobierno aplazó para el 2015 la resolución del mecanismo para el cambio constitucional.
Sin embargo, el último itinerario legislativo del gobierno, emanado del comité político del viernes 21 en la residencia presidencial de Cerro Castillo en Viña del Mar, el tema constitucional estuvo ausente. Omisión que inquietó a algunos dirigentes del bloque. Pese a todo, uno de los jefes partidarios, senador Alejandro Navarro, sostiene que la agenda no permite resolver la promesa de una nueva Constitución.
"La nueva Constitución no va a tener espacio político ni electoral para su desarrollo. No porque no queramos, sino porque no va a haber tiempo político", dijo a La Tercera el presidente del MAS. "Voy a plantear este tema en el cónclave. Asumir que vamos a tener esta promesa de una nueva Constitución sin que ésta sea lograda, será autoinfringirnos una derrota. Será el próximo Presidente de Chile el que tenga que llevar adelante este proceso", agregó.
La modificación de la Carta Magna es un tema que tampoco está dentro de las urgencias del presidente de la DC, Ignacio Walker. "Nos hemos manifestado partidarios de una nueva Constitución desde el 2007. Cuándo y de qué forma, cabe dentro de un juicio prudencial que habrá que realizar en el debido momento", sostuvo el senador.
Fue precisamente para ordenar la labor del oficialismo y establecer cuáles serían las prioridades del gobierno para los próximos dos años, que el timonel del PS, diputado Osvaldo Andrade, planteó la necesidad de fijar una "hoja de ruta".
Y si bien comparte la idea de que el próximo año el esfuerzo debe centrarse en sacar adelante la reforma educacional, para Andrade es importante que el gobierno inicie el próximo año el debate constitucional. "Durante el año 2015 se debe iniciar el proceso constituyente. No hay duda, pues será una discusión larga a la que debe darse todo el tiempo necesario", señaló el diputado.
En los últimos días, los secretarios generales de las colectividades oficialistas elaboraron una minuta con las propuestas que harán llegar los partidos al gobierno y en la que se incluye el tema de la reforma constitucional. "En las conversaciones que hemos sostenido los secretarios, hemos señalado que el capítulo de reforma a la Constitución sea incluido en la hoja de ruta del 2015", señaló el secretario del PR, Osvaldo Correa.
"CUIDAR EL LENGUAJE"
Otra de las aristas de la cita será evaluar la gestión política del gobierno y los déficit de la conducción política de La Moneda, según acusan sectores del oficialismo, los que no han descartado un eventual cambio de gabinete.
"El gobierno no pidió formalmente excluir del cónclave de mañana una evaluación de la gestión del gobierno. Fue una opinión que expresó, pero no la formalizó, por lo que no vamos con ninguna limitación de lo que podemos o no plantear", aseguró Andrade.
Ayer, el senador Walker dijo a TVN que "hay un déficit de gestión política. Eso no es un misterio". Posteriormente, el vocero de gobierno, Álvaro Elizalde, expresó: "Hacemos un llamado a cuidar el lenguaje para no generar esta falsa sensación de que tenemos mayores diferencias de las que realmente existen".