Una gran letra U con una Ñ en el medio son algunos de los logos que ya se discuten entre los ñublenses para identificar la futura universidad con que sueñan en su recién creada región. Para ello ya entró en sesiones la Corporación Pro U. de Ñuble, conformada por distintas entidades e impulsada por el Comité Ñuble Región. Esta es la misma entidad ciudadana que por 20 años luchó por separarse del Biobío y que a partir del 6 de septiembre del 2018 verá entrar en pleno funcionamiento la nueva región.
"Uno de los argumentos para ser región fue que contábamos con una identidad propia en esta provincia, semillero de más de cien artistas de renombre, y ahora la gente nos está pidiendo a gritos potenciar esa identidad. La mejor forma de hacerlo es con una universidad propia, con una fuerte vocación artística, que nos diferencie y responda a las necesidades de nuestros jóvenes", explica Hérex Fuentes, presidente del Comité Ñuble Región.
La idea es que los egresados de la Escuela de Cultura y Difusión Artística Claudio Arrau León tengan la posibilidad de especializarse sin tener que emigrar. Esta escuela es única en su tipo a nivel nacional, pues se trata de educación 100% artística, tiene 27 academias de artes escénicas, música y plástica; dos orquestas juveniles y más de 200 niños en lista de espera. El problema es que la mayoría de sus egresados deben instalarse en la capital para continuar sus estudios.
Es el caso de dos de sus egresados, que están entre los mejores pianistas de Chile y que estudiarán en la U. Católica, en Santiago, en 2018. "Nuestro plan es primero darle un edificio nuevo a nuestra escuela y apoyar el proyecto de una U. para las Artes, y desde la región poder proyectar a nuestros artistas ya formados", señala Juan Pablo Garrido, director de la Escuela Claudio Arrau. "Algo mágico tiene esta provincia que los artistas salen hasta de debajo de las piedras, por eso tenemos que ponernos a tono y tener una visión a futuro como región, ya no como provincianos", agrega Garrido.
Al respecto, Hernán Álvarez, consejero regional electo por Ñuble, ha estado en conversaciones con las casas de estudio con asiento en Concepción, como la U. de Biobío, Católica y de Concepción. "Sí, efectivamente, en una política de desarrollo para la nueva región, ninguna de esas universidades son capaces de responder a los desafíos que la nuestra tiene", dice Álvarez. Agrega que a la marcada vocación artística de la región, habría que agregar lo agrícola y el turismo como motores de desarrollo.
El alcalde de Chillán, Sergio Zarzar, coincide en que toda región sueña con tener su propia universidad, y agrega que en el caso de Chillán, en los 60 logró ser sede de la U. de Chile. "Sería muy positivo volver a ser ciudad universitaria y tener aquí también carreras que hoy están ausentes para evitar el éxodo y la pérdida de identidad de los jóvenes con su propia región", dice el edil.
Lorena Vera, delegada presidencial para la implementación de la nueva región, está al tanto del deseo en la comunidad de contar con una universidad artística. "Por ahora, no estamos enfocados en eso, pero es un elemento que de seguro va a surgir cuando hagamos el estudio de lineamientos estratégicos para ver cuáles son los requerimientos que se plantean en las 21 comunas", precisó Vera.
Cronograma en marcha
La implementación de la nueva región, iniciada el 5 septiembre recién pasado, tiene un año exacto para dotarla de sus nuevas autoridades, consejo regional, servicios públicos, plantas funcionarias, presupuesto y espacios físicos. El plan para lograrlo fue dado a conocer la semana pasada. "Todavía faltan nueve meses, pero lo importante es que entre tantas tareas no nos pille el tiempo y que al 6 de septiembre próximo esté al menos el 95% del plan cumplido", advirtió el alcalde Zarzar.
Vera destacó la buena disposición de los alcaldes, "lo que ha facilitado el proceso de instalación, algunos han pedido que ciertos servicios lleguen a sus comunas, pero en general las solicitudes apuntan a proyectos y programas que pueden llegar a la región".
En forma paralela, la delegada se ha reunido con todos los ministerios para recoger los requerimientos de espacios físicos y funcionarios, capacitar a los funcionarios municipales en la elaboración de proyectos, definir el plan estratégico de desarrollo e involucrar a la ciudadanía en la construcción de la región. "Recién llevamos dos meses de implementación, pero con el nombramiento de la delegada y las presentaciones que ha hecho la gente ha disminuido mucho la ansiedad", planteó John Andrades, consejero regional electo por Ñuble.
Sobre los recursos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional, la delegada dijo que, efectivamente, Biobío va a recibir menos dinero al separarse de Ñuble, ya que, en forma proporcional, va a cubrir en 2019 menos comunas y población.
Al respecto, la Corporación Privada de Desarrollo de la Región del Biobío (Corbiobío) criticó que "hay poca claridad sobre cómo van a funcionar los presupuestos de ambas regiones. Debiesen tener glosas separadas desde ya. Al fraccionar los territorios, las necesidades cambian. Acá, en Biobío, no han sido capaces de terminar el puente, dudo que puedan armar dos regiones", precisa Andrés Cruz, director de Corbiobío.