No pagar más de 50 € o sólo por lo que realmente vamos a usar. Es la premisa de hoteles low cost creados en Europa y que son una alternativa cada vez más usada por los chilenos para viajar. Carecen de lujos, pero no de comodidades para dormir. Sus habitaciones son pequeñas, pero funcionales, y cada servicio se paga aparte, con el fin de disminuir la cuenta. Nada de mucama diaria o cambio de toallas, que se pueden solicitar con costo extra: 10 € la limpieza de la habitación; 1 € las toallas limpias y 10 € 24 horas de internet. Y para los tevitos, 20 € por tres días de pantalla LCD. Sólo el papel higiénico y el jabón están incluidos en el valor, que no dista de lo que cuesta un hotel medio en nuestro país: $ 40 mil.

Daniela Corona y Claudio Rojas son una joven pareja viajó a Europa hace poco. Su planificación incluyó ahorrar al máximo para alargar lo más posible el viaje. "Buscando en internet hoteles económicos dimos con Easy Hotel (www.easyhotel.com)", cuenta Daniela. Esta cadena replica la filosofía de Easyjet, línea aérea de bajo costo que no ofrece ningún servicio extra dentro del precio, pero que da la opción de pagar aparte si se quiere.

Además de su atractivo precio -en Suiza, la pieza grande cuesta 100 € por dos noches, $ 38.800 chilenos-, están bien ubicados. "Las habitaciones tienen lo necesario: el baño es como de avión, pero con ducha, pequeñísimo,  pero tan bien diseñado que su uso es muy fácil", cuenta Daniela. No todos los cuartos tienen ventana (también se paga aparte), pero todos cumplen con altos estándares de calidad y seguridad.

¿Qué ofrece el precio "desde"? Una cama igual a la de un hotel más caro, con sábanas de algodón recién lavadas, edredón y toalla de baño. Eso sí, ni room service ni restaurante, sino máquinas para bebidas, café y snacks.

Formule 1 (www.hotelf1.com), marca del grupo francés Accor, presente en 14 países, incluido Brasil -Río de Janeiro, Sao Paulo y Belo Horizonte-, persigue la misma filosofía: comodidad, accesibilidad y precios bajos. Unos $ 23.000 cuesta en Sao Paulo o 46 dólares en Madrid, una habitación impecable y con un sello: todas permiten alojar hasta a tres personas, dando la posibilidad de dividir gastos. La reserva y pago es a través de internet, las 24 horas. Ya sabe, si es de los que prefieren gozar el viaje puertas afuera, estas son alternativas para dormir bien sin gastar de más. Porque en casa, ¿quién cambia las sábanas todos los días?.